22 de diciembre de 2009

CECILY BROWN (1969) / EMBRIAGUEZ

  • La embriaguez cromática satura el lienzo hasta el vómito. Hay un "horror vacui" que cede total y exclusivamente sitio a lo dionisiaco, a lo báquico, tal si fuese ése el sentido del discurso narcisista de esta pintura que prefiere representarse como una naturaleza lujuriosa que oculta, más que muestra, signos humanos, siluetas, esbozos corporales como si estuviesen completamente fundidos con ella.
    • ¿Qué nos depara esta artista inglesa con su obra? ¿Quizá el retomar la coloración en su gama más aleatoria sin perder por ello un gramo de precisión? ¿Dejar a los cuerpos facilitar su apareo en un espacio en que la festiva forma, en justa correspondencia, se embriague y también fornique?

      • Los empastes densos, gruesos o livianos, cálidos y fríos, se contagian de las verdades y hallazgos del pasado y las infidelidades y alegatos del futuro, lo cual no es óbice para estimar una sobrevaloración actual del trabajo de esta pintora.

    • Mi amigo Humberto viene a todo lo largo del Malecón arrastrando un lienzo por el suelo. Cuando llega a mi vera, me dice que con todos los restos que se han adherido a él se habrá configurado la fisonomía inimitable de un derrumbe. Yo le contesto que eso ya lo había hecho Francis Alÿs en Méjico con un bloque de hielo.





21 de diciembre de 2009

J.M.DÍAZ-CANEJA (1905-1988) / PAISAJES DE REZO

  • En estos ásperos paisajes castellanos del artista español Díaz-Caneja, con quien había contraído una deuda de evocación, se contemplan los ecos de la liturgia, del rezo y la oración.
    • Sobriedad, rigurosidad, síntesis de unos segmentos monocromáticos que no necesitan de presencias ni de ausencias para otorgar plena validez a unos valores plásticos que filtran arados, procesiones y capillas.

      • Es el canto a una tierra rugosa, fosilizada, atrapada sin moverse en un tiempo que pasa agrietándola más, carcomiéndola, fundiéndose con ella para nutrirse de su propia aridez y desventura.


        • El artista, expresándola y condensándola, quiere dotarla de la libertad que debería serle concedida, lo que no ha podido ser así, se ha quedado en la visión de una grandeza ascética, orante y solitaria. La vieja Castilla que aún perdura entre rosario y rosario, entre novena y novena, entre misa, confesión y arrepentimiento.

        • Mi amigo Humberto me lanza señales desde nuestra esquina del Malecón para advertirme que hoy es la jornada conmemorativa de traidores. Yo sigo andando y pongo cara de inocente repitiendo los preceptos catecúmenos de la montaña. Confío en no confundirme porque eso sería mi perdición.



19 de diciembre de 2009

FRANK JENSEN (1956) / VENTANAS

  • Cuando nos asomamos a las ventanas esperamos ver un paisaje, una calle, árboles, edificios, gentes, pero cuando estamos ante los vanos del artista danés afincado en España, Frank Jensen, la visión ya está plagada de metáforas.
    • Cada ventanilla encuadrada en el marco del espacio vidriera es un relato polícromo, una sensación vital de lo experimentado en un momento dado, la clave para la síntesis y descripción de un sentimiento surgido en otra situación determinada. Cada obra genera una sensualidad en la mirada, una placidez que discurre por laberintos cromáticos que dan iluminación a nuestros pensamientos.

      • Es además una geometría de horizontales y verticales que nos devuelve el hecho de contemplar desde una pregunta una respuesta ya convertida en otra pregunta. No hay imagen ni representación porque se han despistado en la zona interna de la superficie, pero si un día afloran quedarán con el ánimo en suspenso ante la difuminación equilibrada y revitalizada de su propia sustancia.


        • Mi amigo Humberto y yo esperamos sentados en el muro a que las mestizas de piel clara nos conviden a miel y papaya. Les dimos el santo y seña y ellas nos devolvieron un beso de color y un suspiro. Detrás vino El Malecón que nos quiso rociar de incienso y mirra porque éramos sus feligreses más conspicuos. Siempre ha de aparecer el Insepulto con el pasado a cuestas cuando ya está más que pisado.




18 de diciembre de 2009

JOSÉ OTERO ABELEDO "LAXEIRO" (1908-1996) / ATMÓSFERAS ACIAGAS

  • En las atmósferas del artista gallego "Laxeiro" laten y se perciben la carcoma de la humedad, la corrosión del salitre, la negrura de las insondables tormentas, la devastación de los turbiones, los ahogados por las sanguinarias tempestades, los extenuados de vivir de la piel dura de la tierra, la carne arrugada y avejentada desde que nace.
    • Es una pintura que encuentra toda su identidad en las sombras, en los trazos rudos y ácidos, crueles, inapelables. Es el reverso gallego y universal, que no se ampara en doctrinas ni corrientes, bebe directamente de la vida, apurando un aguardiente amargo, siempre aguardiente y siempre amargo, que en una última exhalación explora hasta la gota final este revés oscuro y definitivo.

      • Obra que pone en tensión la perturbación que ya llevamos a cuestas y que la incrementa aún más porque su trascendencia plástica se infiltra tanto si hay sosiego como desasosiego.


        • Mi amigo Humberto y yo le dijimos al Malecón que no somos culpables. Nuestra inocencia está por encima de toda duda y por debajo de toda desgracia. Sólo somos un par de infelices que intentamos pintar lo imposible en un contorno condenado a la penumbra y a la sal, sin contar el actuar de los íncubos y súcubos de la seguridad maleconera.




17 de diciembre de 2009

EDUARDO ALCOY (1930-1987) / CAMINO DE RETORNO

  • ¿Qué hizo que el artista español Alcoy tomase el camino de retorno de la abstracción a la figuración? ¿Acaso las tres reglas del antropólogo cubano Fernando Ortiz: ciencia, conciencia y paciencia? ¿O una remembranza que esperaba la oportunidad de manifestarse?
    • Lo cierto es que se percibe una perfección clásica, rememorativa, de voluntad firme y sostenida de hallar esencias iconográficas que cual biblia plástica ilustrasen nuestra visión.

      • No escatima la depuración de soluciones y procedimientos técnicos que insuflen a la imagen toda su encarnación pictórica, que comuniquen y transmitan el hondo fulgor de una representación enraizada en la memoria del sueño consciente, colmado de las alegorías de un destino que se resiste a prescindir de estas epifanías para poder seguir vivo.


        • Por lo tanto, hay que conseguir que el violinista siga tocando eternamente y que la muerte nos siga defendiendo una vez estemos junto a ella.

      • El Malecón nos ha proporcionado a mi amigo Humberto y a mí una guadaña para que cortemos cabezas y hagamos una escultura con ellas. La hicimos pero con las nuestras una vez disecadas. Se parecía a un centauro capado y ciego recitando el Estado soy yo.






16 de diciembre de 2009

FRANCISCO LEIRO (1957)/BOSQUES ANIMADOS

  • Cuando paseamos por los grandes bosques gallegos notamos el aliento cálido de unas miradas en bruto que nos ofrecen asilo.
    • Cuando después vemos en la calle esas criaturas de la montaña esculpidas por el artista gallego Leiro nos quedamos absortos en una contemplación que nos permuta imágenes inalcanzables.

      • Lugrís encontraría un motivo más y una nueva energía para terminar el viaje alrededor de un océano forestal o de una vida, al fin y al cabo, cuando se trata de Galicia, es lo mismo.


        • Estas efigies ya no huyen de nosotros, nos amparan y protegen, y nos comunican que no debemos desesperar si queremos encontrar el lenguaje preciso para dialogar con ellas, del cual lo verdaderamente importante es la compenetración con la visión, la magia escondida de ambas miradas, la que escruta y la que habla.



          • Hermano, me dice mi amigo Humberto cuando nos vemos en El Malecón, el ron, hoy, se había agotado. Sólo he traído una mezcla de cerveza, champú e insecticida, y para comer rebanadas de pan blanco untadas con betún. Podría haber sido peor, le contesto.





15 de diciembre de 2009

ERIC HOBSBAWM/A LA ZAGA

  • Eric Hobsbawm, reputado autor y especialista, sostiene la tesis de que las artes visuales en el siglo XX han llegado a su término o culminaron en un fracaso, tanto da.

  • En primer lugar, por sus limitaciones técnicas ya habían agotado sus principales recursos de tal índole. Y en segundo lugar, con su ruptura con el pasado a partir de principios de siglo se había embarcado en un viaje hacia ningún lugar, su lenguaje era incomprensible y ¿qué podía comunicar? Eran unos actos tan empobrecidos que necesitaban palabras, comentaristas que los explicasen.
  • "En síntesis, cualquier cosa que quisiera hacer la vanguardia pictórica o era imposible o se podía hacer mejor por algún otro medio".
  • Por eso, desde el movimiento "pop" ya sólo quedaba levantar el acta de defunción, de lo que se encargó el retorno del arte conceptual (tener ideas aunque no sean ni buenas ni brillantes) y el dadaísmo.
  • Yo deseo dejar constancia de mi modesto desacuerdo -no soy ninguno de los llamados expertos- a pesar de estas brillantes reflexiones- porque cada día veo un arte que puede ser igual o similar en la apariencia y en los medios pero que no lo es, siempre hay algo nuevo o viejo renovado. Es como decir que por lo que respeta a la novela ya se ha escrito todo, que ya no hay nada más que narrar, lo que no es cierto. Por el contrario, se escribe más que nunca, por lo que lo literario continúa y continuará. También la pintura y la escultura, de eso no me cabe duda.
  • Reproducciones de obras del artista español Francisco Mateos y del pintor cubano Orestes Castro.




14 de diciembre de 2009

DARIO URZAY (1958)/DESENMASCARAMIENTO

  • El color descubre sus propósitos, pues ya está harto de estar enmascarado o disfrazado. Las máscaras ya no le sirven de tanto utilizarlas y las formas de antes han perdido su autenticidad por haberse embozado excesivamente.
    • Ahora toca manar, fluir, desplazarse, propalarse, reproducirse en un apogeo resplandeciente, mostrar su alcurnia y su linaje, su árbol genealógico.

      • ¿Cómo lo llegó a entrever así el artista español Darío Urzay es una conjetura que él ya se encarga de guardar para sí? Hace bien. Ha rasgado las cortinas y ha hecho que el sentido cromático que como espectadores presentimos lo sepamos percibir. Tal es la índole de su creación, cuyas propiedades tiene una armonía naútica, de mares polícromos submarinos en los que sumergirse para fortalecer el conocimiento y la emoción.


        • Cada cinco pasos El Malecón nos detiene a mi amigo Humberto y a mí, nos cachea, nos arenga y luego nos deja ir. Cuando llegamos a nuestra esquina ya somos unos seres patéticos a los que la penumbra ha olvidado.




11 de diciembre de 2009

BERNARDÍ ROIG (1965) / METAFÍSICA IMPOSIBLE

  • Resina de poliéster, fluorescentes, hierro, metales conforman la medida de un cuerpo humano de tamaño natural. Está preso de sus elucubraciones sobre el ser en sí, ensimismado en la simulación metafísica de su evidencia, y por esa razón se pone a prueba, se cuelga con los libros que le instruyen y le engañan, deja que un madero le atraviese y le cuelgue de la pared, se asoma a la ventana.
    • No hay respuestas porque no pueden conferirse como tales, únicamente tiene que haber la representación antropomórfica de las preguntas a través de un espacio desnudo que sirve para congelar la reflexión, dejarla helada y vacía.

      • Si el hombre es un misterio, tal como lo plantea el artista mallorquín Roig, hagamos un clon estético que funcione ante nuestra mirada como el molde que permita penetrar en sus actitudes, gestos, movimientos, deseos, a fin de que nuestra identidad irrumpa desde otros presupuestos, sobre la base de una comprensión plástica incardinada en nuestra memoria activa.


        • Podría ser el campo de acción de un ideario que entre contemplación y reacción establece un motivo del existir conjugado con la fisonomía del seguir viéndonos como fruto del azar, del tiempo o del sueño de la razón.

      • Desde esta azotea nos libramos de la llamada del Malecón para asistir a una catequesis colectiva. Pero estamos a pan y agua porque no ha habido venta. Y el lienzo llora y el pincel se afana en manejarse él mismo. Malos tiempos para la plástica y oscuros para la estética. ¿Tendremos suficiente excremento?






10 de diciembre de 2009

RICARDO ZAMORANO (1923) / SERES DE LA TRANSREALIDAD

  • Mística y pasión de la carne, unión de cuerpos arropados o desnudos en una transrealidad llevada hasta el delirio forzoso del raciocinio plástico.
    • Todas las escenas se suman en un caos medido, en el que vida y muerte juegan a la representación de un sueño que es la eternidad confidente. Hay movimiento, éxtasis, perros demonio, miradas perdidas, la pleamar de un tiempo que ha dejado de serlo.

      • El artista español Ricardo Zamorano, dueño y señor de una poética estilística impecable, acerca nuestra mirada a divisorias que reflejan la sensación que tenemos sobre nuestra propia sustantividad, la relación entre ella y su reverso, sostenidas ambas por imágenes que rubrican una vacilación entre el lugar en el que estamos y el que nos asalta en aquellas ocasiones en que la melancolía, el desvarío, la alucinación o incluso la locura nos ataca de improviso. El artista nos lo hace tangible sabiendo que no ha sido el único pero sí el que le ha dado otra introspección, otros sentir y percibir.

      • A causa del ejercicio escandaloso y diario de un número de artistas en su territorio -escribía el alguacil a El Malecón- la juventud está muy corrompida y su educación se degrada por muchos males y cualidades impías en virtud de ardides libertinos y profanos, y además se apartan del trabajo. Nosotros, mi amigo Humberto y yo, aunque no somos ya jóvenes, también nos condenaron a estar de rodillas y con los brazos en cruz dos días ante el muro y sin una gota de ron. Seguro que fue por arrimarnos a unas sirenas mulatas sin cola.



9 de diciembre de 2009

RAMÓN GAYA (1910-2005) / PINTURA A VIVA VOZ

  • Ramón Gaya fue un raro pájaro solitario en el arte español del siglo XX. Cosa ya sabida, pero no por ello hemos de dejar de evocar una figura que amaba la pintura como el único camino de hacerse a sí mismo. Decía que no tenía preguntas sino respuestas y que sus obras de creación -odiaba el término obras de arte- eran fragmentos de la que nunca llegaría a completar de forma definitiva.
    • Cierto, lo efímero, aunque después se transmute en perenne, aparentemente siempre gana porque nuestra condición mortal lo siente así y además lo padece.

    • Su pintura es el producto de la reflexión pura, limpia, desnuda de sus creencias y convicciones clásicas y antimodernistas -lo que no es tradición, no es que sea plagio, es que no es absolutamente nada, afirmaba-, firmes y seguras, de hasta donde debía llegar la misma. No había por qué imbuirse de ismos y modismos, tendencias y efervescencias, corrientes y pendientes. No existía esa necesidad cuando la disciplina pictórica es una práctica que se asimila con la poesía de la carne, de la naturaleza y del sentimiento del ver y del mirar -no es cosa mentale sino cosa carnale- que ya Velázquez, Solana, Rosales, etc., nos habían enseñado.


    • Su obra, tal como la contemplo, es esa segunda naturaleza que absorbe y transforma la línea, el color, el dibujo, la forma, hasta constituir una visión no manipulada, crecida después de despojarse de la materia y situarse sobrenadando en el lienzo. Paisajes diáfanos, impolutos, que no se espesan, que expresan la cualidad virgen de un cromatismo que se recrea en sí mismo. Una sensación visual que si se nos escapa de la mirada nos envuelve en ella.

    • De todas maneras, según confesión del propio artista a la que nos referíamos anteriormente, ha sido una obra o sinfonía inacabada, que podía haberse fecundado más en ese camino ya trazado desde el principio.

    • Hoy, El Malecón nos obliga a mi amigo Humberto y a mí a dormir sobre las aguas que lo mecen para fecundarlas. Con este frío y esta niebla no se puede, le dijimos. No hubo castigo pero sí un silencio que anuncia una nueva peste.


8 de diciembre de 2009

JOAN PERE VILADECANS (1948) SUEÑOS NÚBILES

  • Nos quedan los sueños núbiles irreales para emprender aventuras en las que la lucidez toma rasgos inconclusos pero definitivos, suceso tal que hay que procurar plasmar porque atesora un guión plástico con el que orientarnos.
    • Para ello, el artista español Viladecans nos ofrece un quehacer muy personal encauzado y dirigido a recrear ese periplo con una policromía que susurra fragmentos de una memoria que de tanto parpadear evoca lo que quiso ser y no fue.

      • Sin embargo, esa sutileza se enriquece entre la fugacidad de lo que parece irse en la visión con la perdurabilidad de lo que al final permanece. Estamos en los dominios de lo transitable e intransitable. De ahí que la fascinación por su obra nunca se desvanezca dada la imposibilidad de que nos extraviemos si omitimos la visualización de su clave, que es también la nuestra como espectadores empeñados en seducirla para que se mantenga en constante diálogo.

      • Robert Walser decía que una obra vital imperecedera no requiere acumulaciones, más bien decide algo que enriquece la existencia, algo que puede ser olvidado, para ser más tarde nuevamente amado, que de vez en cuando puede censurarse, pero que quizá precisamente por eso surta luego un efecto mucho más profundo.

      • El Malecón ha organizado una Bienal de Pintura, pero ha rechazado la participación de mi amigo Humberto porque sus obras son fruto de la sensibilidad y la imaginación. Dice que sólo admitirá a aquéllas que se hayan elaborado en su propio honor y con su propio estiércol untado en miel y jalea real. ¿Y dónde lo vamos a encontrar, le digo a mi amigo, si ya se lo han comido?








7 de diciembre de 2009

ALVARO DELGADO (1922) DESDE DENTRO

  • Los retratos hay que pintarlos desde dentro y después dejarlos asomar para que el tiempo les dé la medida de su ser. Medida que Arnold Puig situaba en la condición trágica del hombre condenado a no encontrarse jamás a sí mismo. El artista español Alvaro Delgado recoge ese testigo y lo asume desde el interior para que con rotundos trazos se desvele un destino con el que hallar la historia de una fatalidad o el relato de un azar o una ventura.
    • Cada gruesa pincelada es la página de una biografía que se va desentrañando poco a poco hasta llegar a su sino final, en el que se perciben claros y oscuros, deformidades e imperfecciones, rasgos ahilados y pétreos, cuerpos y semblantes infectados por los rastrojos de unas existencias a caballo del infortunio y de un hado implacable.

      • Hemos destruido los espejos, nos hemos quitado el disfraz y nos hemos disecado en el lienzo, con lo que ya hemos logrado nuestra auténtica visión, ésa que es la verdadera y que siempre contribuimos a que se nos escape.

    • Mi amigo Humberto siente un tedio mortal porque, me dice, las salidas son entradas y éstas ya no tiene salida. Así, en esta situación, es incapaz de pintar y dibujar las entrañas que tuvo que comerse la víspera o el aguardiente adulterado que tuvo que beber al amanecer.





6 de diciembre de 2009

RICARD RECIO (1952) TERRITORIOS VÍRGENES

  • Si en la pintura las leyes son informulables, son normativas para describir y no para regular, es porque su naturaleza es la de la aventura, la de un gesto que se arriesga y emprende esa peripecia con la conciencia de su propia inseguridad. Recio, artista español nacido en Marruecos, echa mano de su memoria e iconología, para trazar los rasgos en una superficie que se alimenta de color.
    • La extensión polícroma quiere abarcar todo el espacio hasta que la realidad subyacente, cansada de estar debajo, le exige una dimensión y un cosmos que sólo le corresponden a ella. Entonces el artista llega a un acuerdo y deja que la liturgia cromática tabule lo emergente, lo configure y le facilite la visibilidad que requiere.
      • A partir de ahí el muro se abre, aparece la poesía, los fantasmas, los monstruos, el mito, el conocimiento, en definitiva, de uno mismo, cuando, en su soledad, es incapaz de controlar las imágenes que lo invaden y que en lugar de inhabilitarlo, lo estimulan en aras de unos territorios que ya no volverán a ser vírgenes.


        • Amigo Humberto, deja de pintar salidas en balsas o pateras y designa entradas y artificios, y llamemos a los mejores auspicios ingiriendo polvos de sapos, haciéndonos una limpieza con paloma blanca o gallina prieta, alacranes, negro de humo y jugo de ajo.