CZILI (1964) / PENSAMIENTOS FILIFORMES
Decía Greenough que en la desnudez veía la majestad de lo esencial en lugar de las trampas de la pretensión, lo que viene a denotar el espíritu de la taiwanesa CZILI.
Sus esculturas son tenues y volátiles hilos de la naturaleza desnuda que tiene en el pensamiento el traductor de una plástica cargada de ensueños y equilibrios.
Su tratamiento del material es la base de una sensibilización inusitada que va en pos de una magia que no tiene más leyenda que su propia osamenta libre y espontánea.
La esposa que no canta, el juez que no ríe y el ciudadano que no vota, son racionales que no quieren distinguirse de las bestias.
(Silverio Lanza)
No hay comentarios:
Publicar un comentario