18 de junio de 2017

MICHEL HUSSAR (1964) / ¿ESTÁN INVITADOS?


  •  La codicia del mercado del arte es una realidad que cada vez más está rebasando cierta medida, cual su total falta de interés en mantener una clara línea divisoria entre lo auténtico y lo que no lo es.


  •  Por eso traigo a colación el caso del norteamericano HUSSAR, muy célebre actualmente, que deja inconscientemente que en sus obras cale un binomio entre lo que señala Alfonso de la Torre respecto a que perviven en nuestro tiempo la atracción, quizás redoblada al modo de un inmenso reto, por representar el cuerpo y, muy en especial, los enigmas del rostro. O una augusta coña marinera enmascarada de trascendentalidad.  


  •  Alfonso agrega que esa silenciosa condición que portamos y que es también, misteriosa e intransferible, un supremo signo que nos constituye, es un retratar equivalente, más que a añadir, a un despojar.  Respecto a esta obra no soy capaz de sumar sino de esconderme, aunque sea sin su permiso. 

Dame, dulce Luna,
los ojos y las olas,
que rompen cerca de ti,
cuando nadie está despierto.
(Tomy Martínez)

17 de junio de 2017

ANDREAS ANGELIDAKIS (1968) / TENGO QUE SORPRENDERME A MÍ MISMO


  •  Un autor fue muy rotundo al afirmar que en el arte la intelectualidad pura es una abstracción monstruosa, que cuando se ha consumado ya no queda nada, absolutamente nada. Ni siquiera, añado, el papel en que se ha materializado.


  •  Pero la obra del artista y arquitecto griego ANGELIDAKIS es totalmente distinta, porque fusiona ambos aspectos con una gran eficacia, de tal modo que la impronta visual y plástica tiene ese timbre espectacular que seduce, aunque después venga con una suculenta carga de ironía. 


  •  Lo que más irradia en estas instalaciones/arquitecturas es su halo imaginativo, que introduce múltiples variables en una misma construcción, con lo que abre un cúmulo de sensaciones con el que se conjuga una contemplación minuciosa, que al final nos remite a un pensamiento que está al borde de surgir.  


  •  Estos planteamientos que son auténticos puzzles están endiabladamente incardinados en lo estético como forma y espíritu de ser en el tiempo, de hipótesis y su contrario, de que la creación no puede detenerse más que para cerrar la puerta a lo monstruoso feo, al otro no nos queda más remedio que salvarlo.  

Pues es la conciencia la que trae el pasado a la realidad, que es un modo de mandarla al infierno, de librarse de ella.

14 de junio de 2017

JUAN MIGUEL PALACIOS (1973) / ¿CUÁNTO DOLOR ACUMULAMOS?



  • Mark Rothko comentó en su día que "cuando era joven el arte era una práctica solitaria: no había galerías, ni coleccionistas, ni críticos, ni dinero. Sin embargo, era una edad de oro, pues no teníamos nada que perder y sí toda una visión que ganar". 


  •  Y agrega: "Hoy ya no es lo mismo. Es una época de inmensa abundancia de actividad y consumo. No me atrevo a aventurar cual de las dos circunstancias sea mejor para el arte. Sin embargo, sí sé que muchos de los que se ven impelidos a este modo de vida buscan desesperadamente bolsas de silencio con que arraigar y crecer. Todos esperamos que las encuentren".


  •  Y sí, la obra del madrileño PALACIOS es fruto de un silencio oscuro que va integrándose en la muerte, es un lloro trazado que chorrea o se desespera o enseña los dientes antes de llegar al símbolo óseo de la rendición.


  •  La impronta técnica y significante de su obra se alimenta de una belleza agazapada en el fondo de sí misma; abre fauces, deshace máscaras, lanza una comunicación representativa y brutal, descarga emociones y el espectador no se va con un nuevo hallazgo sino con el descubrimiento de que la plástica es un detonante de sí mismo.  

Pues, la esencia encerrada en la imagen en forma"carnal", sensible y apresada en concepto en forma intelectual, ha de ser participada; ha de servirnos de alimento.
(María Zambrano)

12 de junio de 2017

NICOLAS CARONE (1917-2010) / YO PINTO. SI SOY PURO ES OTRA COSA


  • Hay un afán en todo arte por alcanzar la absoluta pereza, dice Hans Sedlmayr, por liberarse de los elementos de las demás artes. Y añade que la pintura abstracta es la pintura absolutamente -¡Vaya con lo absoluto!- pura, es decir, la pintura depurada de todo sus componentes de todas las demás artes.  


  • Y ahí está Lucio Fontana, en defensa del signo abstracto de su obra, que manifiesta que el materialismo establecido en todas las conciencias exige un arte alejado de la representación. Es obvio, a la vista de ello, que se pueden desvalorizar todos los estilos venidos de una u otra parte. Y también lo contrario. 


  • El norteamericano CORONA ha buscado, se nota mucho, y ha convertido su taller en un laboratorio -que es lo que es ahora- y ha pintado experimentando y fabricando, hasta llegar a esa deconstrucción total en que las líneas y las manchas trazan signos sin importar el significado. 


  •  Signos que preceden a la significación y que tratan de significarse a sí mismos, aunque si le damos más calado a la superficie en que se manifiestan, observamos una psicología del gesto y la fuerza del propio sino del autor.  

Ahogas sin saberlo
y serán las manos muertas
las que estrangulen 
tu alma de desierto.

(Tomy Martínez) 

10 de junio de 2017

ALFRED PELLAN (1906-1988) / EL RESUMEN DE UNA VIDA


  •  Siempre me han concernido estas palabras del artista italiano Bruno Munari respecto a la creación artística: "El propósito del artista es comunicar a los demás hombres (y mujeres) un mensaje poético, expresado con formas, colores, a dos o más dimensiones, con movimiento; sin preocuparse a priori si lo que saldrá será pintura, escultura, o incluso otra cosa, con tal de que contenga ese mensaje y con tal de que ese mensaje hable y se haga comprender también al menos por un mínimo de personas". 


  •  El canadiense PELLAN lo reúne todo en su obra, ya sean signos, formas, figuras, colores, relieves, significados, estilo y júbilo de la propia creación en sí. Lo fantástico y lo real asumen su protagonismo y se explayan en un mismo ámbito espacial. 


  •  Se dice que actualmente se reclaman obras desenfadadas, fantasiosas, despreocupadas, híbridas. Lo que podríamos considerar como una coexistencia pacífica de estilos. No es el caso de este autor, porque este artista alcanza una dimensión configurativa que va mucho más allá. 

El hombre es cita de elementos, y la vida un préstamos que hay que devolver de buen grado cuando llegue al momento, decía Séneca con tanta elegancia.
(María Zambrano)

20 de mayo de 2017

JUAN OLIVARES (1973) / NO OS SOLTÉIS


  •  En el valenciano OLIVARES la significación estética incentiva las percepciones más ópticas, las engulle entre esas ondas que conforman un aleteo, un movimiento y un dinamismo donde el color ha tomado una posición determinante a la hora de intercalar sus agudas resonancias.  
  •  Como escribió Merleau-Ponty, "la pintura despierta, lleva a su máxima potencia el delirio que es la visión misma, ya que ver es tener distancia, y la pintura extiende esta extraña posesión a todos los aspectos del ser". En estas obras la vieja distinción entre contenido y forma no tiene sentido, pues en ella la propia forma es contenido y el contenido está dentro de la forma. 
El que sabe escuchar hace de conciencia del otro y, así, sobreviene a veces un silencio: el silencio del que habla con su conciencia o ante ella.
(María Zambrano)

18 de mayo de 2017

RENATO COSTA (1974) / EL TESTIMONIO VISUAL ES MI TUTELA

  •  Estamos ante una obra, la del brasileño COSTA, que debe mucho a la espontaneidad, pues en la creación artística la espontaneidad responde a un empuje instintivo previo a toda reflexión. Ahí es cuando comienza a revelar, a través del medio plástico, los elementos del imaginario personal o colectivo acumulados en ese hecho visible que es la obra.  
  •  El dibujo y ese alumbramiento líquido, que es un cromatismo sensiblemente expresivo, pero casi indomable, nos enmarca una visión en que la naturaleza humana está sometida a su propia y cruel condición, que busca otros espacios y otros ámbitos aunque su esperanza está muerta y su habitabilidad destruida. Lo que significa que esa realidad nos concierne a pesar de que sintamos la añagaza que de que se encuentra plasmada afuera y nunca nos abordará dentro.  
 El hablar a quien nos escucha nos descubre, sin que él nos diga nada, el grado de verdad y, sobre todo, el grado de convicción de lo que decimos.
(María Zambrano)