- La mexicana URUETA sentía la angustia de su tierra, la aspereza de su sol y la tonada de la muerte cultivando su flor. Esa configuración y creencia la pintaba en los soportes como depósito de la memoria y del sueño, una vez fabricados.
- Cada una de sus pinturas era un elogio de la vida y un ensalzamiento de la muerte, hasta incluso la más cruel. Su cromatismo tomaba como base lo acontecido para transfigurarlo en una leyenda hasta hora inédita y desconocida.
- Tanto en su figuración como abstracción blandía el empeño de lo que empezaba y no quería terminar, porque esa realidad se negaba a desaparecer al estar vinculada con la historia de una tierra que no dejaba de disparar. Tal vinculación la fortalecía para seguir, no la debilitaba para salir y olvidar.
Es la voz de las ciudades enfermas sin remedio
-las láminas, los dados, las varillas-
El ubicuo motor y el desconcierto
de una época que se disipa.
(Alberto Blanco)
- Creo que era Carlos Fuentes el que hablaba de la conciencia moribunda del tiempo en medio del gigantesco detritus de la realidad, tal como éstas son sobras que aparecen y conforman las instalaciones del alemán BLOCK tal que descarados signos y alegorías.
- Él recoge las piezas, las aposenta, las acomoda, las organiza y no necesita reflexionarlas para que al final, una vez ultimada su configura y disposición, percibamos que son elementos de unas vidas que se forman con estos pedazos incoherentes.
- Si bien el autor trata de legitimarlas como obras de arte, la coreografía visual se hace añicos cuando su pretensión es proyectar una sensibilidad respecto a su banalidad. Al contrario, implica una desazón por introducir motivos tan próximos en un paroxismo societario ya sobrecargado.
¿Medir nuestros sentires? ¿Acaso
hay medida para el miedo del alma?
(Jeannette L. Clariond)
- La imaginación es un manantial inagotable que se hace luminoso cuando su intérprete está dotado de la magia plástica para plasmarlo desde cualquier ángulo, desde una arquitectura que prevé la mayor significación posible.
- Y en ese punto está la serbia KOSTIC, que no teme el hostigamiento ni la presión compulsiva de la quimera, porque todos constituimos mitos para nosotros mismos, los cuales ella comparte con las miradas que saben ubicarlos.
- Obras como la suya, basadas en un dibujo sólido, muestran la fuerza de lo híbrido, del origen, de la fusión, que nos conducen al misterio de lo desconocido pero no ignorado, de lo orgánico pero muy impuro, de lo sublime con fulgor animista.
No dudes, avanza
contra la montaña de espejos. (Luego
podrás dudar. En donde estés
aprende a dudar
para servir a la vida).
(David Huerta)
- Los movimientos históricos de vanguardia no han podido destruir la institución arte, pero quizá hayan acabado con la posibilidad de que determinada tendencia artística pueda presentarse con la validez general.
- Tampoco podrán destruir a una artista como la alemana SCHMITTEN, que afronta una empresa plástica, en la cual la mirada queda prendida en esa reflexión y sentimiento de lo ondulante y transparente de la materia. Ya quisiéramos haber sido creados bajo esos parámetros gaseosos y celestiales.
- La tenue luminosidad, el movimiento, las capas cromáticas que se encuentran y se superponen declamando poéticamente unos sentimientos translúcidos y diáfanos, unos vertidos escondiendo un fuego secreto y un misterio alado, forman un canto sublime.
Pondré mi yeso, lo que soy, bajo el murmullo de estas
imágenes. Y apagado, en medio de los ruidos que así
se desmenuzan,
invocaré mis rostros, mi letra sucesiva, mis episodios
de partícula.
(David Huerta)
- La escultura estaba harta de que la describiesen, había llegado el momento de que eso fuese imposible, de convertirse en un animal totémico que protegería todas sus claves ante cualquier suceso o hipótesis.
- El norteamericano KENDRICK así lo entendió y asumió, reuniendo todos los materiales que pensó que eran adaptables a una cosmovisión como la precedente, con lo que su siguiente acto era cortar, encajar, pulir, construir, hasta que el ente, ya configurado, ocupase un espacio para considerarse residente.
- De lo que eran unos amasijos y confusiones, la dinámica del hacer los fue constituyendo con la aportación intangible que modelaba una significación viviente y un significado tan solvente como impactante.
Por todas partes gritos, desgarraduras, rincones
infectados.
(David Huerta)
- Un mundo apocalíptico que se engulle a sí mismo. Es la cosmovisión lúcida del chino AILI, que desde una sabiduría pictórica muy diestra, nos ofrece el fin de unos territorios que apenas estaban ya habitados.
- Símbolos de huida y destrucción expertamente enfocados y portadores de la nulidad de unos valores por los que creíamos regirnos sensatamente y que acaban convertidos en escombros de luz mortecina, en un paisaje que sulfura veneno y parodias de sí mismo.
- Obras que paradójicamente iluminan y claman, significan y conmueven, vertebran un hilo argumental visionario y derrotista, y poseen una concepción tan elocuente que es imposible apartarse de ellas sin seguir pensando en el advenimiento de un terror que nos llama.
También los jueves la gente se suicida, pero no es la
misma del lunes o sábado,
los suicidas del jueves son suicidas serenos, irrevocables,
que se hunden en las aguas del jueves para siempre.
(Antonio Deltoro)
- ¿Quién me impide ser irreverente e impío? ¿Quién me impide ofrecer la tabarra como una visión neurasténica? ¿Quién me impide mixturar y traer lo que vuelve después de vomitar? ¿Quién me impide ser un dios que pinta y no rezar?
- Es evidente que la obra del serbio OZBOLT hay que tomarla como un dechado de confluencias, de realidades imaginarias y provocadoras, parodiando una plástica que lleva con la cogorza toda su historia.
- Sus retratos ya amanecen borrachos y sin piel, hablando a solas y con mucho silencio frío, opaco y desnudo. Han hablado con la muerte y están satisfechos con la tumba, solamente les falta la hora del recreo.
Sobre la ciudad del cemento se alza el día,
abajo queda el asombro del tiempo.
(Homero Aridjis)
- Toda su experiencia vital y artística la depositaba en la mala leche de sus obras, que se consideraban verdaderas piezas de genialidad y urdimbre sarcástica y mordaz. No entendía el francés UNGERER otra vía de uso de sus dotes plásticas.
- Su ingenio y capacidad, además de su perspicacia y amplios conceptos respecto a los medios, le permitía esos desafueros de fondo y forma, de inteligencia y transgresión. No iba por las buenas, pero no se conformaba tampoco con citar las malas, las hacía evidentes como si fuesen un muestrario de recuerdos de familia.
- El estar a bordo de la realidad de su época le facilitó la tarea, aunque le supusiese el dejar un vómito al pie de cada obra, el que el perro creyese en la luna sin cielo y en su casa siempre fuese de noche.
Encerrado entre muros
él duerme a la intemperie
dondequiera que anda
crea espacios de la muerte
(Homero Aridjis)
- Los colores retornan a las sombras, porque sombras son las que desprenden los seres que están en el interior de ellas. Vuelve el escenario oscuro con su tragedia de desamparos y soledades, cautivos y marginados.
- En esta obra del rumano MATHE la unidad y coherencia de la configuración nos ofrece la huella de la tradición con signos plásticos del presente, dado que la determinación alegórica es una maldición permanente.
- Estos reencuentros con una hechuras pictóricas que creíamos superadas, no constituyen carencias sincrónicas si su penetración nos conmociona y entraña una visión que todavía tiene su razón de ser si es una invocación de autenticidad.
No hay embrujo tan grande como el placer
de revolcarnos en el lodo:
tú la hechicera, yo el cerdo.
(José Emilio Pacheco)
- No son ilustraciones para cuentos infantiles ni jeroglíficos inocentes ni relatos pueriles, estas obras son fruto de una cosmovisión que tiene en esos espacios y en los que viven en ellos las sagradas formas y razones de una existencia asimétrica.
- Para la francesa LARUS su tipología figurativa va desarrollándose como la reconstrucción de un imaginario que estuviese largo tiempo buscándose y encontrándose a través de la aparición de unos personajes que viniesen desde un cosmos distinto incubado para el arte.
- La autora los acoge y les da vida y realidad, al fin y al cabo son tan efímeros e ilusorios como nosotros mismos, además de que nos aportan otros empeños, otras luces y percepciones que nos faltaban por adquirir.
¿Qué clase de arcilla pesa sobre mi lengua como una historia
muerta en el umbral de su propio veredicto?
(José Carlos Becerra)
- Siri Hustvedt asegura que nuestros pensamientos están continuamente habitados por objetos imaginarios, imposibles, inexistentes, pero en el arte esos objetos se trasladan del interior al exterior, las palabras y las imágenes cruzan la frontera.
- Y así hemos de entenderlo y percibirlo en el caso de la obra de la madrileña SOTO, pues ha cruzado esa frontera trasladando un imaginario plástico ante la presencia de nuestras miradas, que se quedan absortas en unas cosmovisiones en las que el color y sus múltiples manifestaciones, las formas fecundadas y el conjunto asimétrico, alcanzan el recitado perfecto.
- Su trabajo radica en el proceso de consumación de un código que tiene ocultas sus claves, las que visualiza y encarna en una alucinación que nos deja una sensación única de experimentar su advenimiento como poética de una imagen viva y conspiradora.
En el delirio del tic tac binario,
el universo se expande con la lentitud
de la hierba: todo pasa reducido a silencio.
(Gabriel Zaid)
- La obra de la india MUKHERJEE es la prueba más palpable de que la globalización ha quebrado la hegemonía indiscutible hasta ahora de Occidente y ha aportado nuevas voces y perspectivas en el arte actual.
- Estamos en este caso ante una muestra de lo que esa cultura de la religiosidad india puede erigir en este tiempo y para esta época, probablemente con una autenticidad genuina, renovadora, única y magnífica de lo que con un genio colosal se puede construir desde el mito y la creencia.
- Con unos materiales propios de su geología y geografía -cáñamo, yute, tejido- realizó unas deidades postulantes de un delirio y frenesí tal que, al mismo tiempo que se levantan como artificio cósmico, devienen potencias de poder y dominio.
Quiero libertad, y la más alta
libertad del silencio en el olvido
¡y es el aire del mundo el que me falta!
(Gabriel Zaid)
- No parece que el autor, el norteamericano KOSTABI, buscase una representación real, más bien su contrario, transformar esa realidad en un juego plástico estridentista con unos muñecos que simple y esquemáticamente referenciasen otros hitos históricos de la pintura o de diferentes universos culturales.
- Maniquís o casi, relamidos, con sus correspondientes contrastes cromáticos, se erigen en un registro plano edulcorado, a modo de estampa de sombras y luces, cuya desnudez es el signo deconstructivo de un pop furtivo.
- En el fondo es un manierismo contemporáneo que a través de un ejercicio estilístico que el propio artista considera muy integrado dentro del entorno, muestra esa superficialidad que contamina toda la escena visiva, tratando de convencernos que es el mayor paradigma.
(Se ve tan frágil;
pero tan vivaz como siempre.
Qué memoria. Qué gracejo.)
Que se vaya a chingar a su madre.
(Gerardo Deniz)