FENG ZHE NGJIE (1968) / NOS ESCAPAMOS TODAS JUNTAS

•  Al ver estas obras del chino NGJIE que son  propias de una moda más que de un epifanía pictórica, me viene a la mente la frase de Castro Flórez referente a que "da la impresión que hemos llegado a aceptar tácitamente que el arte es un sinsentido y el artista un inútil que es tanto más apreciado cuanto más innecesario su trabajo".  

•  Pero seguro que a Marcel Duchamp le hubieran gustado estas estrábicas de labios omnipotentes aunque no estuviese muy de acuerdo con la pintura de su tiempo por aquello de que "cuando pintas un cuadro, incluso uno abstracto, hay siempre algo así como un relleno forzado".  

•  Lo cierto y verdad es que estos rostros femeninos prometen, mediante esa visualización cromática, una fuerte carga erótica de masajes lentos si tuviesen los ojos cerrados. Abiertos parecen unos zombis que se van a salir de la tela para chuparte la sangre. 

La década de 1980 no hizo más que profundizar las desigualdades de la topografía social por toda América Latina (Mike Davis). 

MANUEL OYONARTE (1957) / LOS HE REVERTIDO

•  Hay que fundir la idea y la acción, el sueño y la realidad, los fondos entrevistos deben vaciarse y mostrarse hasta hacer allegar a nuestros sentidos el misterio de su identidad y colmar en ellos sus apariciones fatídicas. 

•  El madrileño OYONARTE cuadricula los espacios, les imprime una formulación cromática tenue y matizada que no ensombrezca esa figuración esbozada para recalcar su espesor y desnudez. 

•  Son cuerpos que cada uno en su soledad, en su incomunicación, monologan sobre la condición del color intimista y poético que se les ha asignado. De esta forma, siendo pinturas, constituyen una protección efectiva contra los fantasmas (Jonathan Meese).

No cabe duda de que nos encontramos en un mundo en el que las reclamaciones de los bancos y países acreedores siempre tienen preferencia respecto a las necesidades de supervivencia de los pobres rurales y urbanos. (Mike Davis) 

WAEL SHWKY (1971) / CORTEJO AL INFIERNO

•  Grotescos y ridiculizados, no se les puede señalar y concebir de otra forma. Cierto que eran y siguen siendo ambiciosos, violentos, crueles, implacables, codiciosos y pervertidos. También que querían pasar por venerables, justos, altruistas y magnánimos.   

•  Es ahora, merced a la conciencia histórica y visión del egipcio SHAWKY, cuando aparecen, con el acierto de una estética renovadora de la infamia, como fantasmas enanos en un desfile de sombras.

•  Estamos ante una nueva convulsión artística que tiene supuestamente sus detractores, pero este fenómeno, religioso, esperpéntico, bárbaro, político, social, cultural,  es un acontecimiento en sí mismo, una vuelta de tuerca que hace del arte la máxima expresión de una realidad que no deja de sorprender y animar, de testimoniar y vilipendiar. 

El tributo impuesto por el Primer Mundo  a los países en vías de desarrollo es la diferencia  que hay entre la vida y la muerte para millones de personas (Mike Davis)

GUILLERMO OYÁGÜEZ (1970) / ME SIENTO Y ESPERO

•  La mayor cualidad de estas pinturas tan americanas radica en una construcción a la medida de lo que induce a ver y sentir. Panorámicas encerradas en sí mismas a lo largo del tiempo, tonalidades viejas y gastadas, edificios que no parecen contener vida por dentro.  

•  Cada uno de los elementos que integran estas vistas urbanas desprenden una resolución visual que está más allá de lo que se contempla sin más, es una sintaxis de un territorio cansado de una historia que sobrevive, pues sin él no habría existencia.    

•  Indudablemente el español OYÁGÜEZ genera su imaginario plástico a partir de un sentimiento de soledad, pero también él mismo se sorprende de esa inmunidad creativa en que su obra incurre según se vaya extendiendo esa depuración a que la somete. Es como un sortilegio estático que nunca va a desaparecer.   

A escala mundial, las enfermedades relacionadas con el suministro de agua, la retirada de desechos y las basuras provocan la muerte de 30.000 personas diarias y constituyen el 75 por 100 de las enfermedades que afectan a la humanidad (Eileen Stillwaggon). 

ALBERTO REGUERA (1961) / EL SORTILEGIO DE LA CONTEMPLACIÓN

•  Yo creo que el segoviano REGUERA es un alquimista de hoy porque es capaz de dotar a la materia inanimada de poderes mediante una serie de procedimientos mágicos. Pero la manipulación de la sustancia física es también un intento de transformar la mente, y con ello de hacernos capaces de mirar de otra forma. 

•  La mente y un caudal de huellas son precisamente las que se ven concernidas por la obra de él, uno de los más grandes autores internacionales españoles, que es expresión directa de la vida en sus sensaciones más iluminadoras y resplandecientes.  

•  Provisto de prodigios técnicos que no se notan, su biología plástica únicamente existe para el color, esencia de su pintura, no vista como tragedia sino como puro lirismo y cosmovisión.

• Con sus complejos entramados cromáticos e instalaciones aprehende el mundo y le da otra dimensión al universo, dejándonos como espectadores con la impresión viva de que es una plasmación íntima,  armónica y habitable para una humanidad como la nuestra. Háganme caso, contémplelo en el museo Esteban Vicente de Segovia a partir del día 4 de este mes.     

JOSÉ MIGUEL COLLANTES DEPAZ / QUE ALGUIEN VEA SU AMBIGÜEDAD

•  Una magnífica escritora como Samar Yazbek ha expresado que el silencio, aunque con cierta ambigüedad, crea a menudo el espacio propicio para que aflore el significado. 

•  Tal apreciación es válida para la obra del peruano COLLANTES, así como el hecho de que sus valores formales sean fruto de una voluntad poderosa para reinventarse en lo que tiene de más propio: su creación. 

•  Encaja sus silencios con su carga de ambigüedad en los contenidos de unas realizaciones que cuanto más se desajusten más vivas están, más potencia visual adquieren. Que sea éste su sino es lo fundamental.

Desde el punto de vista sanitario, las ciudades pobres de todo el planeta son poco más que cloacas atascadas y rezumantes (Mike Davis).

YOSUKE GODA / NADIE ACABARÁ POR DESHILVANARME

•  El japonés YOSUKE es un maestro, como Giovanni Bellini, de vagar a voluntad por sus obras. Por eso el arte es la expresión suprema del ser humano como microcosmos, como el mundo en miniatura.  

•  Necesita un cuarto cerrado, que sea un espacio sin una señal, para culminar virtuosamente esa experiencia visual de dibujo monocromo -blanco y negro- mediante la cual nos transmite una emoción única que nos envuelve amenazadoramente.  

•  Aparentemente ese dibujo que se expande caóticamente tiene buenos asideros porque cuando quiere se transforma y hace surgir fuerzas mágicas ocultas que exigen esa puesta en escena como su propiedad, como hábitat, como el emplazamiento de un chamán para darles vida y fuerza. 

 Un método favorito para hacerse con suelo los terratenientes: se caza una rata, se la empapa en queroseno, se le prende fuego y, dada su resistencia, es capaz de incendiar cientos de chabolas antes de morir. Problema resuelto (Erhard Berner).