- Mi amigo, el hispano-cubano ALARCÓN ECHENIQUE, tuvo en cuenta el ochenta aniversario de la existencia del Guernica de Picasso para rendirle su emotivo y plástico homenaje pero plasmando su propio contexto pictórico, aquella corriente estilística que le define y le hace pensar en cómo construir una serie que nos permita que en pleno siglo XXI sigamos asistiendo, con la misma dimensión de energía y fuerza, a contemplar y estremecernos con la expresión de lo trágico.
- Felipe no se amilana aunque el cuadro del genio haya llegado a erigirse en el signo de una época, al contrario, para él, concienciado por el drama, se postula como un hipótesis de encuadramiento de figuras, planos, color, dibujo, movimiento y rabia. Provoca, incuso, el collage como la síntesis de una realidad poética de fuego y muerte.
- Les imprime a sus piezas el cromatismo que la obra original no tiene para que tal policromía -oscura unas veces y otras más clara según sea el aguacero de la sangre- sirva de vidriera expansiva, claustrofóbica y hasta caótica, porque el acto de destrucción implica una unidad desoladora, una agonía yuxtapuesta y vinculadora. El autor ha marcado y significado una semántica que quiere enraizarse en el modelo, ya que Picasso no tenía un sentido excluyente sino integrador de cara al futuro.
- No duerme nadie por el mundo. Nadie, nadie.
- No duerme nadie.
- Hay un muerto en el cementerio más lejano
- que se queja tres años
- porque tiene un paisaje seco en la rodilla;
- y el niño que enterraron esta mañana lloraba tanto
- que hubo necesidad de llamar a los perros para que se callase.
- (Federico García Lorca)
- El artista, como en este caso el tinerfeño ALOM, que ha presentado su trabajo este fin de semana en el HYBRID, siempre promete y cumple el llevar al lienzo o al papel "verdades" de cada tiempo vivido. O incluso esencias que son las que perduran y enraízan. El autor le ha hecho caso a Christian Boltanski cuando afirma que tanto el creador como el espectador no deben descubrir sino reconocer. Todo es sabido y todo está allí.
Sin embargo, estas obras, bestiarios, pesadillas, soflamas milenaristas, redenciones, silos mortuorios, esqueletos de máscaras infinita, han reflejado con tanto virtuosismo y tanta precisión en el dibujo, que como en el sueño lo visto y lo simbólico se unen para lograr unas piezas misteriosas de indudable lógica psicológica.
- El impacto que proyecta sobre los que las contemplan significa una multiplicidad de visiones, desde los terrores medievales hasta los monstruos del barroco, de lo bíblico a lo maldito, del silencio al ruido interior que no deja de apabullarnos. Como dijo Eliasson, es la mirada del espectador la que, de manera compleja, constituye o crea la obra. No es totalmente cierto cuando se trata de enfrentarnos a estas visiones de las que el artista es el factor condicionante.
- Nunca desde el principio tuve la idea y el instinto de que mis trazos habían de ser tímidos. La virginidad blanca del lienzo me incitaba a rememorar toda mi sabiduría y vivencias en el devenir de un hecho pictórico que se expresaba en la intimidad de mí misma.
- Esas marcas y signos son tatuajes de mi sino, de lo que tiene lugar dentro de mí y que se esconde tras esta exuberancia cromática que juega con las distintas fases del sentimiento y de la concentración en una práctica cuyo desenvolvimiento intuitivamente se cruza en mi camino.
- En Art-Madrid´2017 se da cita esta obra -cuya génesis me he permitido inventarme- que puede referenciarse todo lo que se quiera, pero que, sin embargo, contiene esas cotas propias de gesto, enunciado y revelación tan íntimas que la mirada ya forma parte de ella, tan exclusivas que no nos deja mirar hacia otros horizontes.
- Estamos ante lo que Alfred H. Barr entendía como una abstracción emocional, incluso mística, espontánea e irracional. Y Robert Ryman nos alertaba de que el cómo de la pintura ha constituido siempre el cuadro, el resultado pictórico final.
- La valenciana PLANA ha explorado su imaginario, ha dado con el verdadero núcleo y saber del mismo, lo ha concebido como ese poema que acompaña toda la vida y lo ha materializado como un sueño. Y seguramente lo seguirá haciendo porque la eternidad necesita de estas vicisitudes plásticas si quiere continuar siendo objeto de fe y de prodigio estético.
Sangre que mira lenta con el rabo del ojo,
hecha de espartos exprimidos y néctares subterráneos.
(Federico García Lorca)
- Cuando me encontré con estas obras del malacitano BENÍTEZ en ART-Madrid´2017 me acordé de la frase de Julien Green: "la muerte se apodera de los ojos de los que van a morir para observar a los vivos". Aunque lo que ocurre es que esa muerte, en estos momentos previos al apocalipsis, produce, merced al imaginario del artista, una alucinación de la que nos cuesta despertar.
- Su virtuosismo, cargado de los grandes poderes plásticos anteriores a su ejecutoria milenarista, ya no es el cómo de la pintura sino como ese cómo conduce a un resultado final deslumbrante, en que el delirio se apodera de las mirada y nos aterroriza con la conmoción que nos causa, al mismo tiempo que es como una vía hacia lo intrínseco de un reconocimiento insalvable.
Cuando se hundieron las formas puras
bajo el cri cri de las margaritas
comprendí que me habían asesinado.
(Federico García Lorca)
- No cabe duda que el sudanés EL-SALAHI es un artista dotado de una inspiración prodigiosa, mucho más significativa, expresiva y convincente que la de sus coetáneos occidentales. Es una iconografía renovadora del numen original que se ha ido sedimentando a través de la fuente de su cosmogonía.
- David Hockney proclamó lo que todavía sigue pensándose: "lo artísticamente nuevo sólo puede surgir de la confrontación crítica con distintas ideas anteriores o contemporáneas". En su concepción, la innovación únicamente es posible sondeando en el arsenal de la historia del arte.
- En este artista, además de ello, la creación es una dimensión que se acrecienta, que metamorfosea la forma del ser compartido, la mística del icono bizantino, la palpitación intemporal de la representación desde una visión espiritual que invita al recogimiento y exaltación de la mirada, la de una lucha por la identidad y la eternidad.
- Como un perro que aúlla interminable
- que aúlla inconsolable
- a la luna
- a la muerte
- a su breve vida.
- Como a un perro.
- (Idea Vilariño)
- Quizás sea un éxtasis zen o una elegía sobre el paso de la vida según Heráclito. Son más que cascadas y más que unas iluminaciones que desbordan nuestra capacidad visual. Es un ejemplo que aglutina todos los hallazgos del llamado arte contemporáneo en uno que resucita la globalidad de las epifanías por descubrir.
- El japonés SENJU muestra, en todas sus obras, un sentido místico y declamatorio, unos espacios que brotan en sí mismos, una serenidad que perfila un pensamiento que extiende el núcleo de su sustentación por todos esos confines, que si en un primer momento aparecen ser concretos, más tarde se van volviendo una poesía verdadera.
Quiero morir. No quiero
oír ya más campanas.
(Idea Vilariño)
- Las concepciones baconianas sobre el ser humano nos dejan un poso premonitorio y de augurios ya determinados. Y es porque la pintura se encarna tanto que se hace carne y sangre, derrota y presentimiento, dolor y muerte, dejando ese manto tétrico como la sustancia imperecedera.
- Esta sabiduría histórica y al mismo tiempo muy concretada en sus orígenes nacionales es la que impone el griego ASLANIDIS en sus creaciones, que son un éxtasis religioso de la locura, del quietismo, de un misticismo carcomido por la inevitabilidad del destino final.
- Tonalidades calculadamente sombrías son las hacedoras de las apariciones del cuerpo y del festín del espíritu, conmovido él mismo por lo que es y por el artificio que sustenta, por el lenguaje que conforma y transmite, por la entraña de lo que es y no ha llegado a ser y creer.
Sólo esperar que caigan
que se gasten
que pasen
los días
los minutos
los segundos que quedan.
(Idea Vilariño)