- Se sigue haciendo pintura auténtica, sin mixtificaciones, sin componendas de uno y otro lado, sin mediaciones, porque no es todavía una asignatura convencional y conservadora, continúa acertando en su proceso de configuración pionera.
- La obra del francés residente en España, LETO, es un buen ejemplo de ello, pues al margen de su motivación icónica, provenga de donde provenga, de lo que no cabe duda es de su afiliación, de su disfrute en la estructuración escenográfica, de su candela crítica, subversiva hacia comercios y desprecios, tenebrosa y en cambio exultante en sus formas, en sus cromatismos, en sus peleas, en su mal y buen gusto.
- Que sean signos de una sociedad en crisis o mucho peor que eso, no tiene importancia, al contrario, redunda en beneficio del espectador que en ningún momento puede descansar la mirada sin que ninguna de esas figuraciones le dé una bofetada en el rostro, aunque enmascarándola con tanto saltimbanqui, con tanto acróbata del presente y de la memoria. Son alegorías o modalidades de las misma para dar y tomar.
alegóricos estos conductores sin conducta estos
proxenetas del recelo estos tapones de la historia
y si decidió quedarse en curuguaty
no fue por terco o por necio o resentido
sino como una forma penitente e insomne de instalarse
en su bien ganado desconsuelo.
(Mario Benedetti)
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