- Palabras de Martin Haidegger que afirman que la realidad efectiva se torna objetividad, la cual, a su vez, pasa a ser vivencia. Así es la pintura del dominicano CORDERO, que va más allá de una realidad concebible y objetiva.
- Sus obras son la alegoría plástica de una existencia maldita en un territorio sumido en un mar que oculta monstruos. Él los desoculta como seres reflejos del hombre, aunque éste al verlos se oculte en ese caso mediante artificios y simulaciones.
- No hay templanzas ni meditaciones, el pathos es expresar la inmensa voluntad de una supervivencia en espacios geográficos que son incapaces de contener el suave discurrir de unas vidas en paz.
Y sonrío
por jugar con las bajadas
que me convierten en el mismo río
con las muñecas sangradas.
(Tomás Martínez)
- Roger Fry enumera los cinco elementos figurativos -ritmo lineal, masa, espacio, sombra y color- que estimulan nuestra constitución fisiológica suscitando emociones plásticas. Pero, evidentemente, tiene que haber algo más.
- El francés AGNONE, en sus obras, se somete descompasada y libremente a esas reglas, pues lo que ejecuta es una coreografía espacial con la que bailar con la mirada al mismo tiempo que temiendo que esa realidad sea más que un delirio.
- La figuración es compacta, inarmónica, desesperada, y como formando un escenario en el que todos quieren estar y aparecer, pervertirnos con su monstruosidad e infligirnos una supuesta visión que es la premonición de tormentos o bacanales, o las dos cosas al mismo tiempo.
Las partes suicidadas secan en la noche
para volver a estar empapadas en la mañana.
(Tomás Martínez)
- Si nos atenemos a estos autorretratos o retratos -él nos da una pista, pero no me la llego a creer del todo- del madrileño AGUILAR, las referencias históricas a nuestra pintura y a los que la protagonizaron están claras.
- Lo que sí es cierto es que en sus obras aparecen los perfiles grotescos de una monstruosidad genial, cerebros y poses que enlazan un pensamiento plástico con la angustia transformadora de una creatividad pendiente de sí misma.
- Por eso los resultados constituyen un sueño sobre los sueños que palpitan dentro de ellos mismos, una imaginación que acaba confesando una emoción que les impelía a hacer de la belleza la más entrañable fealdad.
Me quedo adormecido,
en el único rincón donde las horas quedan muertas,
y los recuerdos son tan sólo una ilusión
de lo que nunca jamás ha sucedido.
(Tomás Martínez)
- Decía Clive Bell que las formas significantes valen por encima del tiempo y el espacio; poco importa si una obra de arte fue creada en París anteayer o en Babilonia hace cincuenta siglos. El mismo criterio de calidad, la emoción estética, sirve para el arte antiguo y el moderno.
- El trabajo de la australiana WAKEFIELD es de anteayer y se agarra a un proceso de depuración, de desnudar al arte de todo lo superfluo o ajeno (Clement Greenberg), de plasmar horizontal, vertical o diagonalmente unas masas cromáticas líquidas de luces y sombras.
- Están impregnadas de una poética marina que engloba afluentes, corrientes, flujos, que desarrollan su propia dinámica de vida, que destellan en silencio bajo la superficie, que trenzan y destrenzan, que se confían plenamente al movimiento plástico que continuamente las impulsa.
Gritos de placer
en las paredes sin puertas del infierno.
Gritos a la vez, y dos docenas de hombres y mujeres
bien hambrientos.
(Tomás Martínez)
- Al rumano GYÓRGY la realidad al final se le ha ido donde ella quería, quizás porque ese fatalismo que la impregna necesita pensar en sí mismo y en su existencia. Surge de sus manos porque sus capacidades plásticas, tan medidas por otra parte, se enredan emocionalmente.
- Algunos entendidos postulan que el significado está ya en la obra en el momento de constituirse, como un resultado dado, como un epicentro desprendido de la mente y sensibilidad del artista. Es posible.
- Hay, de todas formas, una realidad desnuda, sombría, férrea, que cabalga a lomos de una concepción fría, desapasionada, de la naturaleza humana, del mundo, cuyo retrato impecable transmite los ecos de un abismo que así se hacen ver.
En el baile de las soledades
sintiendo amanecer.
(Tomás Martínez)
- Alguien podría decir que los bustos de estos indios pieles rojas corresponden a los sobrevivientes de la gran matanza llevada a cabo en la conquista del suelo norteamericano, prueba de ello son los estragos que se perciben en sus rostros ya contaminados.
- SCHOLDER, como nativo americano, se toma la justicia por su mano, nunca mejor dicho, y con sus obras acomete las leyendas impostoras y la emprende contra ellas mediante una creatividad expresionista, en la que la autenticidad descubre un sufrimiento que nunca tendrá fin.
- En sus representaciones se sintetiza la herencia repudiada con la elocuencia de una vida impresa en su imaginario, alumbrado por un pensamiento que denuncia y designa, que siente y reivindica, que no deja otra opción que el testimonio a partir de la muerte.
Terrenos sin nadie de mi mundo.
Hojas sin ramas.
Aves de plumas descalzas
envenenadas por el humo de lo absurdo.
(Tomás Martínez)
- El mundo del arte es, entre otras y muy diversas categorías, el mundo de la apariencia sensible de las cosas, de su necesidad y evolución. El suizo GODLY, no obstante, se ha empeñado en afirmar y concretar las más cercanas e inalcanzables, tanto en una realidad visual como en una realidad física.
- Ante esta acusada luz y densa sustancia pictórica ha de procederse desde lo más evidente, descriptivo y elemental hasta, dando un paso más, lo más oculto y simbólico. La sensación inicial que se produce en la contemplación de estas obras se vuelve una reflexión sobre su forma, su configuración, el hecho que nos atraigan hacia ellas, hacia su interior.
- El artista no oculta los trazos porque ha conseguido con ellos, mediante la aplicación de una depurada experiencia, la carne y el espíritu de esta naturaleza que se erige siglo tras siglo como un ídolo que otorga los favores o maldiciones, y que ha nacido para ser venerado. Bell establece que el punto de partida para todos los sistemas de estética ha de ser la experiencia personal de una emoción particular. Este parece ser el signo de este formidable trabajo.
El dolor se vuelve color
y el color una ternura
amarrada a la voz del que pronuncia
siempre en la distancia, con eco.
Tú respira.
(Tomás Martínez)