MANUEL PREGO DE OLIVER (1915-1986) / ALMAS EN PENA

•  El gallego PREGO se alimenta de verdades y de realidades que están en el subsuelo del destino de un pueblo y un territorio. Y como tales ahí están incubados los orígenes plásticos desde los que partió para culminar su obra.  

•  La tradición negra tiene en él uno de sus máximos exponentes renovadores y un agente para la manifestación más expresiva y rotunda sobre el devenir de una humanidad y una fauna que no han tenido la fortuna de su lado. 

•  Gran dibujante y constructor de personajes y ficciones, ha resuelto con éxito las formulaciones pictóricas que se ha propuesto, incluso con una eficacia física que nos conmueve por una epifanía que no por prevista es menos incisiva visualmente. 

Copular [definición]: sacar espacio, meter tiempo.

(Agustín Fernández Mallo) 

AGUSTÍN PÉREZ BELLAS (1925-1982) / ESTÁN AQUÍ CONMIGO

•  Se ha dicho, y aquí queda escrito, que en España los monstruos son siempre verosímiles y viables. No crean, nos dice el gallego BELLAS, que son fantasías irreales sacadas de elementos separados de la experiencia racional.

• No se lo crean, insisto, los veo todos los días, son paisanos de mi tierra encallecidos por el sufrimiento y la desolación, sucios, feos, desnudos, tremendistas y siempre con la muerte a cuestas.   

•  Por eso exclamó mi colega Constantino Grandío, al pie de la tumba, lo de que a min no me da medo morrer, lo que me da es vergonza. Con ese trazo expresionista, el artista nos depara unas imágenes representativas de un modo de ser en geografías que no están pero se presienten.   

• Colores enlodados, embarrados, como pieles enfermas, aunque centelleando soterradamente, ofreciendo matices y tonalidades que son como espíritus agrios, ásperos y cansados de vivir.   

FREDY VILLAMIL (1980) / LA CLARA CONCIENCIA DE LO QUE VOY HACIENDO

•  Al cubano VILLAMIL ya le dediqué mi atención en este blog el 4 de enero de 2014 porque la magnitud de su pintura demuestra que las raíces estaban bien agarradas, la memoria plástica mejor enganchada y el prontuario figurativo acaparando lo más profundo.     

•  Porque en sus cuadros caben todos los valores, tanto los formales como los espirituales, tantos los abstractos  como los concretos, tanto los rítmicos como los sedentarios. La diversidad lingüística como la cromática se explayan y derivan en una visualidad desbordante y en una significación que abre muchas fronteras.   

•  Si la verdadera función del arte es expresar sentimiento y transmitir comprensión, su meta está más que lograda. Pero además la abundancia y penetración de su concepción creativa da más extensión y hondura a sus contenidos, a las simetrías antillanas de un imaginario tal real como fantástico. 

LINDA MIEKO / LA POESÍA DE LA SINCRONÍA

•  Se abren espacios estelares sinónimos de plasticidad y de claves aéreas que cubren un fondo nuboso uniforme de donde surgen. Se multiplican y recortan, buscan formas dinámicas para poder metamorfosearse a través del movimiento.    

 Así es como la japonesa MIEKO construye estas estratosferas a partir de un conocimiento y unas sensaciones que la hacen liberarse y engranarse bajo un pensamiento que tiene una concepción artística basada en la armonía y en una cavilación íntima y espontánea.   

Si desfalleces

mira

a los ojos del buitre.

Habrás dejado

al menos

razón de tus cenizas.

(Ada Salas)

PEDRO S. MORILLO / DEL COLOR EMANA LA FUENTE

•  El manchego MORILLO tiene la intuición de unas extensiones muy mansas que revelan emanaciones de colores audaces, intrépidos, que fluyen o se adensan, crean su propia atmósfera y hemisferios. En esos recovecos que forman, lloran y se lamentan.     

•  Ésta es la concepción de su arte que, según un experto, es la expresión de cualquier ideal que el artista llegue a realizar en forma plástica. Por tanto, su prontuario ha de ser la materialización del prodigio que le angustia. 

•  Con ello viene a cuento lo que dijo Clement Greenberg respecto a que el arte es cuestión de obviedad y emotividad, de inferencias sensibles más que intelectuales o informativas; la realidad del arte sólo se revela en la experiencia misma, no en la reflexión sobre esa experiencia.

• Si en estas obras hay un sentimiento de vida y fuerza, también se encuentra una razón creativa que subyace como un aura agregada, como el motor de una búsqueda que nunca acaba.

Los pájaros picaban
la burbuja de luz donde sucede
el oropel del mundo.
La rosa de la carne
se deshizo.
(Vicente Gallego)  

EVA LUNDAGER (1960) / AURAS QUE NO SE REPITEN

•  En lo abstracto siempre se encuentra el artista que quiere crear y sentir que ha hecho algo que no poseía existencia anteriormente. Por eso, nos pide que nos acerquemos a las obras con moderación, sabiendo que, como en todas las cosas, para comprender hace falta un poco de entrenamiento y de pasión.  

•  Así es como hallaremos dentro de estas pinturas en papel de la norteamericana LUNDAGER mundos completos y realidades que no son insondables, al contrario, son la expresión de un lenguaje que nos transmite las claves de una creación personal y universal.

•  Es una plástica que revela indagación y formas de percibir paisajes soñados o de ensueño, reflexiones sobre las variaciones cromáticas y sus significados, sobre la emoción de verse en esos magmas que hablan de amor y fusión cósmica.

 La muerte comparece siempre que paseo, que mastico, que copulo, que llamo por teléfono, que muero.
(Eduardo Moga)

MICHAEL CHOW (1939) / ES LA REFLEXIÓN SOBRE UN TODO BIOLÓGICO

•  Señalaba Ángela Vettese que en el arte contemporáneo ninguna tendencia borra a la otra; como máximo, se coloca a su lado y obtiene mayor visibilidad durante un tiempo.

•  Para el chino CHOW, actor, diseñador, restaurador y artista plástico, la pintura es el elemento más determinante de su todo biológico, el cual construye y expresa como un engrudo de pigmentos policromados y otros materiales pegados que metafóricamente son el resultado de una experiencia plena, vigorosa e impactante. Pero sin incurrir en heterodoxias que no le dan para afrontar una inclinación que no es la suya.       

•  Además de la exaltación plasmada en todas las superficies y conforme a ella, se percibe quizás lo que apuntaba Baudrillard respecto a un deseo dentro del hombre de ansiar el desperdicio y el lujo, implicando con ello un intercambio simbólico dirigido a alejar la idea misma de la muerte.