AGUSTÍN PÉREZ BELLAS (1925-1982) / ESTÁN AQUÍ CONMIGO

•  Se ha dicho, y aquí queda escrito, que en España los monstruos son siempre verosímiles y viables. No crean, nos dice el gallego BELLAS, que son fantasías irreales sacadas de elementos separados de la experiencia racional.

• No se lo crean, insisto, los veo todos los días, son paisanos de mi tierra encallecidos por el sufrimiento y la desolación, sucios, feos, desnudos, tremendistas y siempre con la muerte a cuestas.   

•  Por eso exclamó mi colega Constantino Grandío, al pie de la tumba, lo de que a min no me da medo morrer, lo que me da es vergonza. Con ese trazo expresionista, el artista nos depara unas imágenes representativas de un modo de ser en geografías que no están pero se presienten.   

• Colores enlodados, embarrados, como pieles enfermas, aunque centelleando soterradamente, ofreciendo matices y tonalidades que son como espíritus agrios, ásperos y cansados de vivir.