- La figuración en espacios cerrados es un sueño fantasmal, que define los contornos y hace huidizos los rasgos tras capas de color difuminadas, desmigadas en oleadas que conforman la auténtica identidad. La presencia plástica impone su dominio por encima de una voluntad puntualizadora.
- La figura, concretada, al mismo tiempo que escenificada en lo que hay de divagado en su propia naturaleza, emblematizada en esos rasgos formales específicos, atrae la reflexión sobre sí misma, sobre esa condición que al no verse en un sentido, despierta más las indagaciones en otros, hasta llegar a esa concordancia entre la mirada de unos y otros.
- Es una pintura que sitúa las imágenes en planos que conjugan la ideología del símbolo con la humanidad perdida en su búsqueda. Hay un espíritu vivo que perdura desde los albores del arte y que está presente a lo largo del tiempo, y es en este momento en el que el español OYONARTE considera que así debe contemplarse y trasmitirse.
- Soy temblor que se aumenta
- entre animales ávidos y asombros y escrituras,
- entre letras que han hecho su verdad con mentiras,
- amor y desamor jamás distantes.
- Todo lo que me cerca en mí palpita
- como una indagación, ya en su origen frustrada,
- donde es poco estar vivo, donde es poco
- abrir los brazos siempre, ir a todos los sueños,
- desolarse en la luz de todas las bellezas.
(José Manuel Caballero Bonald).
- Confesaba un personaje de John Berger, en una de sus novelas, que el color ha de conseguir todo lo que hay entre el hueso y la superficie de la carne, toda esa parte del cuerpo donde las sensaciones se clavan como peces espada o el dolor muerde como el tiburón.
- El color y la figuración del joven gallego MUÑOZ son casi más antiguos que el tiempo, pues sin ellos no sabríamos cómo se hizo nuestra existencia. Pero también es el icono imperecedero de toda nuestra pintura, la única que es inmortal, lo demás todo es efímero. Su depurado hacer es lo que nos hace ver una realidad tan múltiple como concreta. Porque hay en ella una luz que nunca se apaga aunque la muerte ya haya pasado y se haya despedido.
- No sirve de nada perdernos en referencias eruditas y antecedentes históricos y estéticos. Lo que es útil es fijar nuestra mirada en el momento presente en esas obras y escuchar el rumor de sus imágenes, el destino que guardan y revelan, los sentimientos que despiertan. En cada instante serán distintos y nosotros habremos de volver a contemplarlas una y otra vez para seguir percibiéndolos.
- Soy muchedumbre acaso
- que deriva en las sombras de un misterioso acecho.
- Mi palabra pronuncia nombres vivos,
- materias conocidas de todos,
- asuntos comunales que van de boca en boca.
- ¿Por qué, entonces -me dije- mi voz ulcerativa
- besa y canta y contagia
- cuando ahora la fundo con metales secretos,
- cuando quiero acuñarla con troqueles de indicios?
- ¿Qué desdén me aniquila si me llamo el hermano
- de otro ser que construye su paz con el silencio?
(José Manuel Caballero Bonald)
- Hay frases a las que tenemos que rebobinarle el sentido, como la del alemán Gerhard Richter, que asegura que su experiencia le ha demostrado que no existe ninguna diferencia entre una tela realista y una tela abstracta: ambas crean un similar un efecto en el espectador.
- Como todo lo que se sugiere en este campo, es posible pero no imposible. Pues por otra parte, Baudrillard mantiene que necesitamos ilusionistas que sepan que el arte y la pintura son ilusión.
- El alemán MARKUS OEHLEN -no confundir con su hermano-, miembro de los Nuevos Salvajes, solamente se propone fusiones y laberintos, engranajes y mecanismos entre la forma y el color, la evasión de ideas previas y los fenómenos informulados. Los resultados son vibrantes, como jeroglíficos abstractos que tiene sus claves hundidas en el asomo visionario de una figuración que se encuentra musitada pero no transitada en silencio.
- Hay veces que los hombres tristemente
- a la muerte cantamos.
- Allá en el esqueleto está escondida,
- dura, fija, aguardando.
(Carlos Bousoño).
- La pintura de mi amigo vasco ÁLVAREZ VÉLEZ ni reniega, ni se parodia, ni se vomita a sí misma. Todo lo contrario, es afirmación contundente, una creación entre lo astral y lo telúrico, y una confesión que se desliza prodigiosamente.
- Pero antes de llegar a ello, escuchó a Moreau cuando dijo aquello de que es necesario pensar el color, tenerlo en la imaginación. Es evidente que eso es lo que él hizo y conservó, y con ello hizo una pintura que, como señaló Blaise Cendrars, es un estado de ánimo único.
- La abstracción, en sus obras, es determinante, pues por sí sola cubre con su sentido plástico orden y caos, nubes y tormentas, tierras, mares y hombres. La gama cromática y sus tonalidades atraen la mirada como si estuviera penetrando en campos desconocidos, en alturas insondables selladas por unas luces que no niegan sino que acarician.
- Por tanto, el artista es un ilusionista que establece los parámetros de la magia, que encuadra la significación maravillosa de sus efectos, de su lenguaje, que deja al color que sea la matriz de una progenie que extienda sus alas y circunscriba sin límites sus áreas de acción y vida.
- Al final, hemos de pensar que es difícil no sentir ni reunir las capacidades para ser un visitante de esas galaxias que tenemos tan cerca, que nos sanan cuando deliran y nos enferman cuando no dejan que la emulsión se prolongue más allá del allá.
- Ganamos la alegría bajo un cielo sombrío
- mientras el desaliento nos prendía en sus redes.
- Hemos tenido sueño, hemos tenido frío,
- hemos estado solos entre cuatro paredes.
(José Hierro).
- El color es una fuente de placer con la que disfrutamos cuando se desangra. En estas obras de la alemana GROSSE conforma no sólo un plano, sino múltiples, hasta envolvernos o circunscribir nuestro entorno con sus irradiaciones y destellos.
- No tiene un espacio definido, se salta fronteras, acordona, arrolla y encierra, su tiempo es ilimitado, el don que nos transmite y remueve no cesa. ¿Cómo no ver en él un aspecto de nuestra génesis? ¿Una marca de nacimiento que introduce un desarrollo y una forma de conocimiento?
- Baudrillard dice que si existe hoy una gran dificultad para hablar de la pintura, es porque existe una gran dificultad para verla. Yo no veo ninguna, a no ser que no estemos hablando de la misma, del concepto que la ha de definir si es que hay alguno, y no intuición que se funda en ese ir más allá en la contemplación.
- Vivir, vivir lo justo,
- hasta el último verso.
- Que la muerte nos libre
- de un vivir a destiempo.
(Rafael Montesinos).
- El hombre en la civilización actual es una perpetua interrogación, que nace de sus propias dudas ante el destino a tomar o la acción que ha de seguir para una transformación que nunca llega. El alemán NEUMANN lo ve así y así nos lo transmite.
- Por eso sus obras parten de indagaciones que después quedan en su interior pero dejan a la figura sin marca exterior, desposeída de su identidad, embarcada en misterios sobre su naturaleza, ciega y con pesadillas vacías.
- Son reflexiones sobre su propio quehacer, su trascendencia, el valor que añaden o restan a una plástica que también en estos tiempos es un cúmulo de búsquedas que no pueden quedar sin respuesta, por mucho que Lacan diga: todo ese asunto de la materia y la forma, ¡cuántos viejos cuentos de copulación sugiere!
- Y en la gloria del mundo,
- pobre gloria del mundo, que nos basta,
- los malvados erigen sus robadas mansiones,
- sus blancos monumentos, sus panteones insignes.
- Dime, ¿por qué? ¿Por qué?
(Salvador Pérez Valiente).
- La voluntad expresionista del hombre es una distorsión en paralelo a la angustia que uno siente cuando se coloca ante el soporte, son vientos del exterior huracanados los que le recorren desde la cabeza a los pies, los que le impulsan a crear como si fuese el fin de sí mismo en un tiempo y sociedad determinados.
- Como decía Michaux, el artista es aquel que resiste con todas sus fuerzas a la pulsión fundamental de no dejar huellas. Al final las deja porque está en su condición y es el medio de encontrarse a sí mismo frente a lo que le rodea y lo que le aprisiona. Y de transmitírselo a los demás.
- En el caso del alemán HÖDICKE, adscrito al llamado neoexpresionismo, la hoja de ruta está muy clara, es pura naúsea sobre lo que somos, sobre como nos vemos, sobre como estamos marcados dentro de una plástica que lo vierte según unos presupuestos existenciales que bordean la sumisión a la sátira, el vacío y la pérdida de convicción. No hay piedad en esos gestos pictóricos que trazan el escepticismo de haber venido y todavía no estar de regreso.
- Primero han de morir otros sentidos.
- Yo bien lo sé: definitivamente
- la muerte me entrará por los oídos.
(Javier de Bengoechea).
- La pintura, el collage y el arte en general es un lenguaje sin códigos (aunque nos empeñemos en crearlos y significarlos como referencias y cauces), es decir, extremadamente elástica y sin adherencia a los significados (los espectadores somos los encargados de dárselos o negárselos).
- Por tanto, nada hay previsible en este mundo de la imagen, que juega con la mirada que quiere adentrarse en ella y su opacidad, su no transparencia. En este caso, estas obras del italiano PARENTELA se posicionan ante el espectador como un gran marco significante, en el que el lenguaje concibe múltiples asociaciones y relaciones con un nexo común que es la figura en sus distintas vertientes constructivas y deformadoras, en un puzzle que aglutina formas de enfocar una plástica que refleje lo que trata de escapar de nuestra imaginación al mismo tiempo, en una secuencia sin fin.
- Cuando evocamos lo interno pensado, se nos va de las manos la precisión para captar una realidad distorsionada. alumbradora de incoherencias, magias, sentimientos y emociones, esas introspecciones que el artista sabe captar y culminar con una formulación patética o luminosa, melancólica o pecaminosa, virtuosa o de enfatizante fealdad. Él lo hace posible porque tiene las claves, la capacidad y el sentido de la creatividad determinante.
- Los tristes son como el recuerdo; apenas
- si tienen luz sus ojos, su mirada;
- apenas si son alguien, la tristeza
- les llena lentamente toda el alma.
(Rafael Morales).
- El inclasificable Maurizio Cattelan decía que si intentas llevar los límites un poco más allá, de pronto te das cuenta de la facilidad con que el mundo del arte es capaz de absorber cualquier golpe. Pero no pasa nada, supongo que es parte del juego.
- JUSTMAD, en cada edición, forma parte de ese juego de ir más allá porque es la tipología de lo emergente lo que está tratando de mostrar y vender. Pero, aunque las intenciones sean buenas y los emergentes traten de flotar y no sumergirse en lo oscuro (para algunos sería la ocasión), los resultados son irregulares y ponen ante nuestra mirada desde lo perverso (esos perros disecados y colgados) hasta lo más banal.
- Claro que es cierto que si la manualidad tiene un enfoque conceptual y el material banal de la vida diaria, muy en el espíritu de la idea surrealista, se transforma en algo sorprendente, surge el arte. De ser así, hemos tenido la oportunidad de contemplar los productos de unas voluntades creadoras, a las que encontrar una interpretación plenamente adecuada es quimérico (Adorno).
- No obstante, si he de citar a autores, no puedo pasar por alto a ROCÍO GUERRERO (¿metafísica del cuerpo?), JAVIER DE BENITO, JOAO CASTRO SILVA, TANIA BLANCO, GUILLERMO PEÑALVER, STARKY BRINES y otros. En definitiva, los hallazgos han sido despertares acendrados más contundentes que años pasados, lo cual es de celebrar y mantener.
- Vivir es caminar siempre de sombras
- cargado hacia un fatal destino.
(Leopoldo de Luis).
- Reproducciones de obras de:
Rocío Guerrero.
Tania Blanco.
Bonus-Extra
Joao Castro Silva
Guillermo Peñalver
- La pintura sigue siendo el deseo absorto que nos descubre desde el exterior. Nunca pasa una página sin que haya removido tierras y campos de visión. Ni cede un milímetro si piensa que la metástasis ya está funcionando y hace nacer un alba.
- Y dentro de este amanecer el creador va destilando y celebrando su propia versión del acontecimiento visivo, situándose dentro del mismo, estableciendo parámetros desde los que observar la finitud que él, como mediador, tiene que evitar que cese. El norteamericano STALEY no deja que la luz ni la forma se apaguen, al contrario deben dirigirse a nuestra mirada para que intercambiemos lugares y entrañas, las profundas razones de cada plenitud y del furor del encuentro.
- Es una obra fruto de la libertad, de ver el mundo a la luz de unos principios por los que rige su hacer y su construcción, su fe en que la decisión es la que enlaza su producción con lo que entiende que debe ser una plástica que ha de ganarse vibración sin enloquecer al sueño.
- En esta encrucijada
- del cuerpo siempre lleno de luz, de amor, de gracia,
- y del alma sombría, siempre oscura, siempre vana,
- qué ramaje de sangre apartaré con la mano
- para ver el paisaje que fuera de mí se prolonga.
(Ricardo Molina).