- Los abstractos del burgalés ALVARADO se configuran como un expresionismo muy inclinado a delatar su ideario interior, pues está inflamado de tal ansia que sus capas, pigmentaciones y texturas acaparan todo el espacio y lo cifran.
- Lo sensorial y lo sensitivo se desprenden, se derraman como si fuesen productos de una dramaturgia en la que todo un cúmulo de acontecimientos estuviese sucediendo. Sus formulaciones cromáticas acaban siendo un deseo para la mirada, un canto visual impregnado de magnetismo.
- Con confabulaciones pictóricas como éstas, la abstracción sigue ejerciendo una función liberadora y plástica, imprevisible, asombrosa, cargada de una significación que subyace sobre su base epidérmica haciendo posible un sentir y un meditación estética insoslayables.
A consejo de ruin, campana de madera.
Maravillosa la obra de Alvarado.
ResponderEliminarGracias por compartirla.