- Despertar al alba con el lienzo enmudecido. ¿Qué le habré dicho para que me deje este pasajero, habitante desconocido en busca de sí mismo? Ya no hay más tiempo para más secretos en esta isla sin viento y sin remedio. Pero los versos del poeta Blas de Otero, susurrados por la mulata en esta alcoba vacía, caben en el tiempo de nacido:
- Sí, Cuba. Quién te tuviera
- siempre delante, tendida
- ante mi vista, bandera
- que es venda para mí herida.
- Se me distraen los ojos,
- se me divagan las manos.
- Azules, blancos y rojos
- colores de los cubanos.
- Cuba, sí, quién te llevara
- hundida en el corazón,
- como una lancha que halara
- hacia esa estrella tan clara
- que ríe en el malecón.
¡¡¡Como os duele vuestra Cuba!!!
ResponderEliminarMe encantaron habitante y versos!!
ResponderEliminarMe encantaron...habitante y versos!!
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