Leyendo el libro de Manuela Villa, "Arte Emergente en España", me asalta la sensación de si seré capaz de percibir en toda su intensidad estos nuevos hábitos artísticos. Sobre la base de fotografías digitales, sobre aluminio, impresiones digitales sobre papel metálico, metacrilato o marco de poliuretano, instalaciones, videos, acumulación de escombros, transformación de una estación de tren abandonada en un hotel gratuito, aparatos de radio, DVD, etc., toda esta mampostería tecnológica y no tecnológica conforman una nueva estética basada en en la producción industrial moderna y en la influencia que ésta ejerce sobre el medio ambiente, la sociedad, las relaciones humanas, etc.
Este panorama me hace considerar que estamos entrando ya en un mundo virtual donde en un momento dado ya no sabemos ubicar la verdad artística, si es que la hay o la ha habido, y de donde estaba más o menos radicada toma ya rumbo hacia otros horizontes, se derrama en otras latitudes distintas a las de un hombre de mi edad, educado en los valores que fundamentalmente representaban las vanguardias de siglo XX, que a su vez fueron herederas de un pasado que nunca dejó de hacerse ver y sentir.
Lo de que en una videoinstalación de más de una hora, una pelota de tenis rebotando incesantemente sobre una pared blanca para que la vaya tiñendo de pintura negra, sea una reflexión sobre los estereotipos del artista romántico y sobre la construcción de la mirada, es un planteamiento que se me escapa, excepto si lo valoro como un reverencial respeto por toda innovación artística, siempre que tal innovación sea lo suficiente rara como para ser únicamente entendida dentro de las fronteras de la élite más estricta (Angel Escárzaga).
Y como ejemplo tenemos a FUNKY PROJECTS, una empresa de innovación social que creen que la práctica artística tiene grandes limitaciones para trascender más allá del mundo del arte, del plano simbólico. Por eso emprenden proyectos económicos, entendidos como intercambio, y empresariales, entendidos como el resultado de la colaboración orientada a la obtención de resultados.
En definitiva, muchas de estas ideas y designios quedarán arrumbados y es posible que queden como testimonio los más válidos, aunque ya sabemos que en el arte, como en cualquier cosa, todo el poder están en manos de los creadores de opinión. Y hoy más que nunca.
Muy interesante entrada, buscaré ese libro.
ResponderEliminarEl blog está muy bien. Saludos desde Valencia y suerte para ti también. Chao