Ante la obra del italiano PARZINI percibimos que en su abstracción sombría y terrosa la realidad corporal del acto de pintar siempre se expresa.

Las manchas cromáticas gravitan insomnes y solitarias sobre un espacio que las contiene en su desventura, en la textura de su tristeza y desolación.

Pero su elocuencia plástica no es muda, revela un sinfín de avatares, sacrificios y renuncias, de olvidos y reencuentros, de abandonos, heridas y trashumancias.

Aunque para muchos de nosotros pase inadvertida, se está librando una gran lucha de poder en torno a la forma, los términosy los límites de la libertad de expresión global...
(Timothy Garton Ash)
Ante la obra del cubano PEDRIDO me puedo dejar guiar particularmente por su contexto y destino, pero es un enfoque insuficiente para determinar los parámetros configuradores de una visión plástica cuya expresión va más allá.

Cada medio de representación que toma presencia es el símbolo de un universo que en su representación nos traslada a un suceder que está siendo en ese momento, a una morfología y metamorfosis de origen de raíz ancestral y cultural.

Al mismo tiempo que la materia, la estructura, el color y la forma alcanzan una determinación concreta en su pintura, la cadena de significados crece, se desarrolla y profundiza hasta la obtención de una contemplación activa para el espectador.

Yo sostengo que la manera de convivir adecuadamente en este mundo -ciudad consiste en disponer de más y mejor libertad de expresión.
(Timothy Garton Ash)
Se dice que la absolutización de un único medio, incluso cuando se lo intensifica sensiblemente, pone de manifiesto un cierto predominio de tendencias cosmovisivas respecto a la capacidad de configuración artística.

La francesa VERDIER ha optado, en ese sentido en su obra, por imponer un rítmo de síntesis vivencial como una estructura de una realidad anclada y movediza en su conciencia.

La propuesta formal que articulan sus piezas responden al reto de un ideario plástico oriental adaptado a su propio quehacer constructivo y emocional.
La fidelidad al arte es fidelidad a la vida y a la libertad.
En estas obras del cubano VALDIVIA, se capta todo un movimiento interno y distintas trayectorias con las que ha querido expresar tanto la energía permanente como las simbiosis que constantemente se producen.

Son signos barrocos que en su entropía y topografía muestran un sentido plástico que evoca y se ensimisma en visicitudes en blanco y negro enganchadas a sus propias efusiones.

El autor, entre lo espontáneo y pletórico de sus dibujos y filigranas, trata de lo ancestral en el futuro, de lo hereditario en el presente, de lo que hay de vidente en el arte.

La pintura sirve a la libertad cuando es fiel a ella misma.
Se ha afirmado que el arte abstracto es una muestra ontológica de la realidad, la constitución de uno de esos supremos intereses del espíritu para la conciencia.

Para el británico BRANCH lo importante no sería si debía pintar abstracto o no, sino que en la obra apareciesen corporeizados y encarnados los signos sustanciales del universo.
Y en este magma cromático podemos manifestar lo que Herbin atribuía a los colores, cual era el que inducían a un significado cósmico profundo.

Enamorado de ideologías absolutistas, convertidas en ídolos sanguinarios, nuestro siglo (XX) ha sido intolerante e inicuo.
(Octavio Paz)
En todos los dominios la actividad del hombre, y en este caso del artista, culmina en formas, es decir, en creaciones orgánicas y acabadas.
.png)
Pero sin las capas y los revestimientos cromáticos el artista sabe que el resultado espiritual no alcanza la significación que le es propia, y, entonces, la obra de arte queda al albur de respuestas que no se encuentran.

Sin embargo, el dominicano CAMINERO tiene el don de saber acometer, entrar, definir, catalizar y simbolizar las imágenes, con toda su hondura colorista, de nuestros ritos y de nuestros signos.
.png)
Duerme, ya tienes en tus manos
el azul de la noche inmensa.
(José Hierro)
Para el italiano MORENI la libertad pictórica y plástica es adherirse y encontrarse en las situaciones que le permiten la mayor libertad de elección.

Y a fe que lo ha conseguido al culminar una obra en la que las formas y el color lo han significado todo, lo han depurado y visibilizado hasta que el gesto sea el signo.

Son turbulencias que se agitan en el frente existencial que conlleva una práctica cuyo destino revela la condenación de un cosmos que está ya marchito.

El cuerpo se deshace en llanto,
en ancha tumba el mundo se convierte,
y en ella, consumido de anhelos y temores,
se posa el corazón como ceniza.
(José Hierro)