28 de mayo de 2016

UNA FERIA DE ARTE EN MI CASA / NUNCA VAMOS A CERRAR ESTE HOSPICIO

  •  Evidentemente, en toda Feria a organizar hay un trabajo previo aunque sea en una acogedora casa familiar donde rompe con la clara finalidad de la misma para imprimirle otra marca y destino. Y además en este caso, se presta a la coincidencia con Francesco Bonami en lo que no es trabajo sino labor de artista, escritor y mayordomo, pero sin esa mácula de frustración.   
  •  Por segunda vez la vivienda del artista David Heras en la villa de Cobeña se convierte al mismo tiempo que en una Feria en una celebración de los propios artistas participantes. Saben cómo son y cómo han de significarse en un ámbito que ahora se han apropiado como suyo. 
  •  Se ven cargados de otras fuerzas y energías para dotar al futuro de otros lenguajes sin perder de vista que el contexto viene de atrás y vacila desde el presente, o lo que es lo mismo, no son los temas los que hacen grande a un artista, sino la manera en que los mismos se plasman en la obra.
  •  Javier Ayuso, David Delgado, Julio Falagán, David Heras, Antonio Labella, José Luis López Moral, Patricia Mateo, Mover sin Mover, Santiago Peni, Carlota Pereiro Cendón, Luis Pérez Calvo, El Pez Globo, Rubén Rodríguez Silguero y Anthony Stark tienen claro también que el arte es un ámbito donde uno puede y debe afirmar algo y nunca negarlo. Hirst siempre se pasa de listo al declarar lo contrario.   
  •  En todo este registro de experiencias de todo tipo y semántica la base son los distintos esquemas de materialización de las acciones creativas, tanto en sus enfoques conceptuales como en sus fantasías de libertad.  
  • Por otro lado, en ninguna de las realizaciones y sus realidades se observa el fenómeno del que habla Sarah Thorton respecto a que si la omnipotencia y amor incondicional de los artistas no tienen freno, producen, por lo general, obras de dudosa calidad.  
  •  Por lo pronto, todos estos imaginarios reunidos conforman un muestrario muy ideado, presentido y extenso de propósitos, expresiones, visiones, convicciones y la fecunda matriz de lo visual.  
  •  Sus construcciones no son fruto del azar, sino de un arranque muy pensado en sus líneas generales, en su metodología, en los elementos que necesitan para ajustar el trabajo a la necesidad íntima de su desarrollo.
  •  Sus atributos descansan en la formulación de un valor simbólico que se adapta a la búsqueda de la mirada y la guía con su impacto hacia el espacio que ocupa, confrontando así los pensamientos del emisor y receptor en una dialéctica de sensaciones y reflexiones.
  •  Y otro aspecto a destacar de esta singular y ejemplar reunión es de que todavía no han llegado a la escala insolente de Hirst cuando grita que todos se vayan al carajo si le critican por pensar que el arte y el crimen están profundamente relacionados, ya que este último tiene una creatividad increíble.
  •  En cuanto al mercado del arte y su modus operandi se nota una más que superficial sincronía, algo así como lo que dice Cady Noland sobre su naturaleza laberíntica e intencional o en palabras de Andrea Fraser, más corrosiva, en cuanto a que el mundo del arte es cada vez más un mercado donde el que gana se queda absolutamente con todo.  
  • Finalmente, creo que no estamos ante una exposición posmoderna fundamentada en el simulacro y la proliferación de la apariencias, sino en la dimensión auténtica del arte, en su verdadera condición de testimonio y conocimiento. 
La naturaleza nos ha dado dos oídos y una sola boca para recordarnos que vale más escuchar que hablar.
(Zenón de Elea)

Acabo de probar que nada es risible en este planeta. Planeta grotesco aunque soberbio.
(Los Cantos de Maldoror)

15 de mayo de 2016

ANDREA FRASER (1965) / ESCUCHEN Y MIREN

  •  Me considero artista -me tomo la licencia de hablar en su nombre- porque me miro por fuera y por dentro tantas veces como sea necesario. Mis perfomances tiene un sentido crítico institucional y retórico, me hacen desnudarme o vender mi cuerpo, sin caer en dramatismos o poéticas absurdas. Y como no lo entienden, lloro y asumo mi próxima vejez acurrucada en una silla.
  • Si quieren entender, escuchen a Abramovic cuando señala que el perfomance es la construcción en la que el artista pasa del ser inferior al ser superior delante del público, o bien del ser ordinario a una zona y un estado mental diferentes. No se preocupen, no es una nueva teología.

  • En fin, que la norteamericana FRASER genera amores o rechazos, aunque su narcisismo y su ego sean tan grandes como para fundamentar en ello toda una teoría de la estupidez y maldad que absorbe y después plasma en sus actuaciones. No obstante, lo que es una introspección de lo que le rodea y que después utiliza, tiene ya un aspecto enfermizo y confuso, que desea al mismo tiempo que destruye, que provoca a la vez que no va más allá. Es la terrible ansiedad del miedo a descubrir que dentro de sí el vacío ya no dice nada, se mantiene en silencio. Y de contemplar algo, será un cuerpo desnudo abierto y enseñando las vísceras.

Un arcángel, bajado del cielo y mensajero del Señor, nos ordenó convertirnos en una sola araña y venir cada noche a chuparte la garganta, hasta que un mandamiento llegado de arriba detuviera el cuerpo del castigo.
(Los Cantos de Maldoror)    

12 de mayo de 2016

FRANS KRAJCBERG (1921) / LA NATURALEZA CONSERVA SU CREDO

  •  El polaco brasileño KRAJCBERG materializa sus vivencias en función del espacio en el que vive y le rodea como un sentimiento real. Es una naturaleza pródiga en encuentros, ideas y emociones.
  •  Con ese soporte la creatividad emana siguiendo sus dictados, configurando formas entrelazadas de troncos, maderas, lianas, etc. Son composiciones icónicas que sirven de estandartes de una estética basada en la salvaguarda del medio ambiente como signo de plenitud humana. 
  • Los lugares, las dimensiones, los volúmenes se ajustan a la fuerza de su físico y constitución, al mensaje y formación de una visión que se deje seducir por la magnitud del mensaje y claridad del lenguaje, de una poesía viva que da luz a una topografía.   
 La gasolina es el incienso de la civilización.
(Ramón Gómez de la Serna)

10 de mayo de 2016

BEATRICE WANJIKU (1978) / ¡SAL DE AQUÍ!

  •  Estoy empeñada en pensar siempre que puedo ver cosas en mi pintura que los otros no ven. Y entonces grito y sigo pintando pese a que el pigmento negro devore al blanco. ¿Será verdad o me lo invento? 
  •  Se ha señalado que en un contexto lingüístico globalizado las identidades adscritas a territorios culturales quedan borradas. Afortunadamente, ante la contemplación de estas obras, se comprueba que no es cierto. La keniata WANJIKU sabe cuál es su origen y cómo afirmarlo a partir de una plástica del grito, el furor y la negritud. 
  •  Y si como observador te surgen las dudas, las hará tan grandes y penetrantes como sea necesario. Como diría Nikolái Ostrovshi, así se templó el acero, que en el supuesto de esta autora sería se traduciría en que así ejecutó el símbolo de un continente que siempre está olvidado.  
  •  Su concepción pictórica no merece despacharse con un encuadramiento sino expresando el reconocimiento de sus múltiples signos, de su condición de pureza dramática y goyesca y su grado de humanidad y talento. 
Oh pederastas incomprensibles, no seré yo quien lance injurias contra vuestra degradación; no seré yo quien venga a verter el desprecio en vuestro ano infundibuliforme (en forma de embudo).
(Los Cantos de Maldoror) 

7 de mayo de 2016

ADEL EL-SIWI (1952) / ¿QUÉ PASA CON MIS ROSTROS?

  • Respecto a los rostros me remito a una cita, cual es la de Artur Ramon cuando indica a ese grupo de pintores que cierran su universo a cal y canto y sólo permiten que te asomes de puntillas al muro para contemplarlo. Por tanto, necesitas tiempo y retina para derribar la puerta y disfrutarlo.     
  • Despachar estas obras del egipcio EL-SIWI como expresionistas o incluso -únicamente se me ocurre a mí- como un deseo de mostrar lo extraño, lo desusado, lo remoto en el espacio y en el tiempo, propio del arte romántico, no es suficiente. 

  •  En ellas se encuentra un sentido plástico, de raíz musulmana y oriental, que se conjuga con una marca contemporánea, con lo que tenemos historia y realidad completas añadidas a un misterio subyacente que emana de estos rasgos.
  •  Hay lo visible que se desprende de ese cromatismo de pátina, que vigoriza los distintos planos de la superficie y da relieve a las texturas, y lo invisible que se remonta, que se piensa, que se narra y discurre por la memoria como una senda tenue y feraz. 
¡Humillación!, nuestra puerta permanece abierta a la feroz curiosidad del Celestial Bandido.
(Los Cantos de Maldoror)

4 de mayo de 2016

OSVALDO PEÑA MUÑOZ (1950) / EL HOMBRE ES UN SER QUE SE ACOPLA

  • Hay que reconocer que Carl André ha estado ingenioso  a la hora de ofrecer su gran idea de definición triconceptual en materia escultórica, consistente en señalar su evolución desde la forma a la estructura, y desde ésta a la escultura como lugar.    
  •  No creo que el chileno PEÑA se haya planteado esta teoría como la manera de decidir su concepto macroescultórico, pues sus argumentos formales, muy sintéticos, están dentro de un ideario geométrico humanizados por la pequeña figura del hombre. 
  •  Postulan, no obstante, un sentido cosmogónico en el que el ser humano es una pieza más que se acopla, que se ve obligado a seguir el rumbo que le trazan. Es como una leyenda visual al revés, en que lo importante no es el final que se añade sino el principio creador. 
Sólo soy libre si todos los hombres y mujeres que me rodean son libres.
(Mijaíl Bakunin)

2 de mayo de 2016

JUAN OLIVARES (1973) / JAMÁS ME ENCONTRARÉ SOLO

  •  Artur Ramon ha sido tajante en afirmar algo con lo que vengo machacando hace muchos años, cual es que "por mucho que desde los postulados más modernos se empeñen en matarla, la pintura resucita como la bestia de una película de ficción y lo hace porque es inherente al hombre".  
  •  En la obra del valenciano OLIVARES la bestia de la plástica se hace viento y génesis de una materia enriquecida por la luz y el cromatismo de una visión íntima del artista que la desliza con una sutileza casi indescifrable.   
  •  Solamente cabe sumergirse dentro de ella y pensar conforme al cosmos en que gravita, sentir ese ancho océano por donde discurre, confiar en que siga siendo tan limpia y sensual como las huellas que va dejando, y conserve esos vestigios para que nuestra mirada sea también su misma experiencia.  
¡Y qué abundante manantial de errores y engaños es cualquier verdad a medias!
(Los Cantos de Maldoror)