4 de diciembre de 2010

JESÚS DE PERCEVAL (1915-1985) / SOY INDALIANO

  • El inspirador del movimiento indaliano almeriense era por encima de todo una fusión de las corrientes imperantes con lo mediterráneo, su cultura, su historia, su arte milenario. Asimiló esos cánones y desde ellos salió a cultivar lienzos, a pigmentar telas tales que cuerpos de luz de vírgenes bañadas y emergidas.
    • Ahí, quizás, residieron sus exploradas limitaciones, buscadas y conseguidas, refrendadas por una conjugación cromática que festejaba los clamores del alba. Se nutría de genes predispuestos, fáciles de hallar pero difíciles de fecundar si no se disponía del instrumental pictórico preciso.

      • De vez en cuando agarraba otro enfoque para sembrar el motivo, sin esperar que creciese, no hacía falta, únicamente era asomarse y allí estaba, aguardando, paciente, el hecho, que podía ser una huida, un incendio picassiano o un carnaval.



        • Fue un artista incansable que parecía que siempre hacía lo mismo y después resultaba que nada era igual, que cada momento plástico era único, que respiraba abierto en sí mismo. Alguien podría decir que sólo nos dejó conocer el lado amable de una tierra olvidada. Mas podría ser que no, que debajo del candil también hubiese sombras.



30 de noviembre de 2010

JAUME MUXART (1922) / NADIE TIENE QUE DECIRME DONDE DEBO ESTAR

  • Contemplando la obra del catalán MUXART me cuesta creer lo que muchos afirman respecto a que el arte sólo interesa a los que lo crean, a los que obtienen beneficio de él, a los que lo coleccionan y a los que lo estudian y analizan.
    • No considero que sea cierto porque si bien la eternidad se oculta, el tiempo se manifiesta. Y el arte es tiempo, también eternidad, por eso no se puede negar que funciona como un genuino avatar existencial. Lo que supone que tal y como percibimos estas piezas, no podemos negarle la transmisión de un cúmulo de ansiedades entre nosotros, espectadores, y ellas, pues encontramos en su interior una referencia expresa a microcosmos desvelados.

      • No importa que sean consecuencia de síntesis ya ensayadas y probadas, en absoluto; ni que tienda a confesiones de estilos predeterminados. El autor alza todo un compendio que no se deja reducir ni limitar. Trata de sobrepasar lo inacabado y situarse en un desequilibrio gozoso.


        • Ahora bien, trallazos visuales de la angustia y la muerte aparecen como fantasmas indoloros que connotan y definen toda actividad artística, reflejo de encuentros y desencuentros con el ser y la nada, con la búsqueda y el vacío.




27 de noviembre de 2010

FRANCISCO LOZANO (1912-2000) / NO RENUNCIAR A LO VIVIDO

  • Si he de pintor no puedo perder la memoria táctil, tectónica y visual de lo vivido y el donde ha transcurrido. Y no se trata de ser fiel sino de ser más que el hacedor de una lealtad que me frena. Seré detractor de mí mismo y devoto de la ilusión plástica que me embarga cuando la memoria es sólo un silencio alucinado de la mirada.
    • El levantino LOZANO, otra maravillosa excepción, ha revestido el color mediterráneo de su propia historia de contemplaciones, lo depura según una rememoración no escrita y sí revelada, luego lo plasma en paisajes que han esperado este momento para exteriorizar su propia biografía y éstos ya consiguen ser por sí mismos.

      • Antes de empezar la obra, el Mediterráneo y su cuenca esperan, abrazan al que viene a confabularse con él, a hacer de su claridad una ontogénesis de la que emerjan vestigios y alboradas sin esperas.


        • Deambulando, el artista, poseído del don cromático de la precisión y de la luminosidad centenarias, ha oteado lo sentido y presentido, ha percibido la quimera de sustantivarlo, de no dejarlo al albur de conjeturas, de volcarlo y obligarlo a vivir desde esos espacios que abren campos a la seducción de lo que estará siempre al alcance de un observador que sepa dotarlos de señas de identidad, de reflejos y ansias de goce.

        • La obra de esta autor viene a significar tradición y la modernidad que la remonta, tiempo, oficio y resumen, un reclamo para seguir con los ojos las ocres incógnitas que nos depara una creación que no únicamente está pendiente de sí misma.




23 de noviembre de 2010

FRANTISEK GROOS (1909-1985) / HACEDOR DE CRIATURAS

  • Jugar al escondite es una suerte para imaginar nuestras fantasías a solas. Ellas son el bálsamo entre la muerte y la vida. Y para el checo FRANTISEK , miembro del Grupo 42, es un relato de escaramuzas con las formas desarmónicas de una criaturas.
    • ¿O es que la desarmonía no es en el fondo más que una simetría que procrea tales criaturas desde la infinidad de líneas, signos, símbolos, emblemas, siluetas, contornos, colores que las conforman?

      • La expresión se mide por la naturaleza y convicción de los hallazgos, por la afirmación de que lo que miras es más de lo que ves, de que las tan cacareadas soluciones no son más que la consigna de descubrimientos que devuelvan a nuestra perspectiva esa luz que hemos de exigir siempre.


        • Por tanto, éste es un jugador empedernido que busca su destino en artificios o artilugios plásticos cuya disonancia sea la realidad viva de una presencia que conjuga el yo del creador con la fuerza mágica de la sensualidad y hasta del miedo.

        • Logrando que el dinamismo y el rompecabezas de miembros y siluetas, de perfiles y cuerpos se conciten, la aparición está garantizada si el acierto ha tomado forma conforme al ingenio del artista y la contemplación meditada del espectador. Pues si encontramos afinidades visuales sorprendentes es que están completando algo de nuestro repertorio vital para hacerlo visible y fértil.




20 de noviembre de 2010

ANTONIO LAGO RIVERA (1916-1990) / SIEMPRE LO ESTOY PINTANDO



  • Para algunos pintores el tiempo necesita derramarse antes de precipitar su sustancia en la tela. Para el gallego LAGO el tiempo ya está vertido e inclinado sobre el contemplador, aspirando la fragancia que dimana de su mirada.

  • Sin embargo, las tierra gallegas siguen escondiendo los vapores del sueño, entendiendo que no hay tales sin las brumas que ennegrecen las tintas, la balsa de fluidos o la capa de misterios que más que apaga, alborea y serena.
 


  • Entonces, y para hacerlo más insalubre, hemos de decir que la acuosidad es un saldo del que tirar sin miedo porque nunca se rompe, y es que hay que entrar en ella sin cumplir el protocolo, únicamente dejando que el horizonte o la insonoridad del fondo nos arrastre hacia la interioridad de unos espacios que aparentan un vacío que paulatinamente se llena.
El color es esencia y consistencia, es más que todo y menos que nada, en unos paisajes y bodegones que anuncian soledades grandes, encuentros fortuitos y seres extintos o a punto de serlo.

  • El remate lo pone este poema incompleto de mi amigo y artista José Luis Álvarez Vélez:
Sabia envenenada de noches frías, / quiero darte una velada con sabor a estrella, / cauce artificial, rotas las cañadas, cubiles de descanso.   

18 de noviembre de 2010

MARÍA PAZ JIMÉNEZ (1909-1975) / LAS NOCIONES NO CUENTAN

  • Algunos dicen que no existe crítica ni teoría pretendidamente seria sobre arte. Lo cual no es cierto del todo, no podría serlo en esos términos, por cuanto en tal caso perderíamos la suma de lo que aporta y enriquece, de lo que una vez abierto ya es fluido incensante.
    • En esta aproximación a lo teórico encaja la obra de la española JIMÉNEZ, que tiene en el espacialismo y el informalismo su certificado de empadronamiento. Y ¿por qué?, pues porque no es suficiente saber que la libertad creadora es el sueño de ti mismo transformado en un buscador de fenómenos plásticos que consigues que se liberen de sus cadenas. Has de recomponer inevitablemente las estructuras del enigma.

      • También son insuficientes los remolinos, los ideogramas parlantes y tentaculares, las cicatrices, los tumores, las huellas que se hacen a sí mismas para poder contemplarse.



        • Lo que esta artista ha concebido es una estrategia de búsqueda de fuentes desde las que poder tomar y crear a partir de ellas, sobornarlas con dudas cargadas de certezas, dejarlas explayarse cediéndoles el sentimiento íntimo de lo expresado tal como lo necesitan, en fin, el evento hecho y realizado sin mesura, con la tranquilidad del agobio.


          • Por consiguiente, es una pintura para estar sentado con ella en perpetuo monólogo de miradas urgidas en mitigar la ansiedad de cada hora.