27 de julio de 2019

JOHN BOCK (1965) / NO ME CONFUNDAN CON UN TRAPERO


  •  Creo que era Carlos Fuentes el que hablaba de la conciencia moribunda del tiempo en medio del gigantesco detritus de la realidad, tal como éstas son sobras que aparecen y conforman las instalaciones del alemán BLOCK tal que descarados signos y alegorías.  


  •  Él recoge las piezas, las aposenta, las acomoda, las organiza y no necesita reflexionarlas para que al final, una vez ultimada su configura y disposición, percibamos que son elementos de unas vidas que se forman con estos pedazos incoherentes. 


  •  Si bien el autor trata de legitimarlas como obras de arte, la coreografía visual se hace añicos cuando su pretensión es proyectar una sensibilidad respecto a su banalidad. Al contrario, implica una desazón por introducir motivos tan próximos en un paroxismo societario ya sobrecargado.    

¿Medir nuestros sentires? ¿Acaso
hay medida para el miedo del alma?

(Jeannette L. Clariond)

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