19 de noviembre de 2013

BARTOSZ BEDA (1984) / NO DEBEN MIRARSE


  •  Este artista polaco, que está exponiendo actualmente en Madrid, en la galería Liebre, es todo un sinónimo de recuperación de las viejas maneras infiltrándolas de nuevos modos. Por este blog han pasado muchos retratos, incluso autorretratos de determinados autores, y todavía puedo asegurar que esa temática existencial y artística no está acabada.  


  •  En este caso BEDA nos ofrece otra clarividencia plástica y facial de lo que son sombras, centelleos, espantos, temores, locura y delirio. No acaban de ser máscaras pero sí exploraciones. No acaban de conferir almas pero sí espíritus. La acritud del tiempo queda grabada y la acritud de la vida también.


  •  Obras que la densidad cromática les da el cuerpo necesario para que nunca desentrañen el olvido ante la muerte, y esa masa informe que les rodea y les significa les coloca en la posición del espejo que se ha roto por lo ajado que estaba. Son nuestro reflejo y no hay forma de taparlo. 

Muerto amor al lado mío yace
parecido a las heces en que nace.
(Leopoldo María Panero)

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