4 de septiembre de 2013

JOSÉ ANTONIO MARTÍNEZ CELA (1966) / NO CESO DE CONTEMPLARLO


  •  Los líquidos esponjan las telas o la madera, se integran porque se conocen perfectamente, después cuajan y se fijan, van en pos de unas texturas que conformen un paisaje que aunque siempre se haya visto, se contemple desde otros ángulos y haga que la mirada culmine en otras latitudes.     


  •  Es un trabajo y esfuerzo ímprobos, que se manifiestan bajo todas las gamas y tramas en pos de ese resultado que nos susurre desde el fondo. La materia no parece tal, como si estuviese sometida a un proceso de evaporación que expandiese una atmósfera, un ambiente, una poesía entre tantas herrumbres y desmontes.     


  •  Y el español MARTÍNEZ CELA no ha acabado ahí, persigue un horizonte más telúrico y más emocional. Así lo escribe y así lo labora incansablemente para que la visión tenga una mayor cualificación de claridad. 

Hoy es siempre todavía.
(Antonio Machado)

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